Guadalajara, Jalisco. 

Colectivos protectores del medio ambiente y vecinos de municipios afectados por la contaminación del río Santiago y el Lago de Chapala se manifestaron a las afueras de Casa Jalisco para exigir solución inmediata al saneamiento del agua y la atención urgente a las medidas cautelares emitidas por la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH).

Solicitaron se establezca a la brevedad un esquema de atención puntual y total para la salud de las personas afectadas por la contaminación de las aguas con metales pesados y otros desechos industriales y de drenaje, todo en un estado en el que se encuentra el epicentro mundial de enfermedad renal, en San Pedro Itzicán.

Enrique Lira, activista por el saneamiento de la cuenca del río explica cómo los diversos gobierno estatales y federales han sido omisos ante las disposiciones que marcó la CIDH que desde inicios de febrero de este año, ordenó a ambos gobiernos realizar diagnósticos de la salud de los habientes de Mezcala, Chalpicote, El Salto, Juanacatlán y San Pedro Itzicán, comunidad que suma la mayor tasa de enfermos renales en todo el mundo.

Desde la determinación de la Comisión Interamericana a la fecha, han muerto seis personas más por daño renal, la última, una mujer que al ser traslada de varios hospitales esperando por su diálisis, se contagio de COVID-19 y finalmente murió este 23 de julio.

"Le dieron la orden el 7 de febrero, de ese tiempo para acá van seis muertos ahí, el último murió apenas este 23 de julio, Rosa Ariadna, que era enferma renal de San Pedro Itzicán, de Lázaro Cárdenas número 15 A, la llevaron primero a Ocotlán a su hemodiálisis, no le funcionó, se la trajeron a Tlajomulco, no la pudieron atender y se la llevaron a la 110 y se contagió en ese hospital de coronavirus, murió de enfermedad renal y de coronavirus y el Gobierno del Estado no está haciendo nada para proteger a los enfermos renales de Poncitlán".

Enrique Lira agrega como los gobiernos de Jalisco y de la Federación también han sido históricos cómplices de las industrias que vierten sin tratamiento alguno sus residuos industriales en el la cuenca Lerma- Chapala- Santiago desde el Estado de México y otros ocho estados lo largo de la cuenca hasta llegar al lago de Chapala que según estudios, tiene entre sus aguas, metales pesados como mercurio, arsénico, plomo y otros contaminantes de alto riesgo para la salud humana.

De ahí la urgencia de esta protesta para que se haga valer el artículo 29 bis dos de la Ley de Aguas Nacionales que dicta la obligatoriedad de las empresas a tratar sus aguas y reutilizarlas.

"Cada industria debe de tratar su agua y reutilizarla, pero hay una gran corrupción en todos los estados con la industria, de la que algunos son socios, o hasta industriales también los gobernadores, y eso hace que no cumplan. Es una delincuencia organizada la que tenemos en los gobiernos, todo el que no cumple la ley y mata gente es un delincuente y ellos están organizados y con impuestos de nosotros viven y no los invierten, y es más, no tienen ni que invertir, nomás obligar a las fábricas a que lo hagan".

Durante la manifestación se instalaron féretros en la banqueta de la Casa Jalisco rodeada por vayas de contención en el acceso principal. Estos féretros han sido utilizados por estos colectivos para evidenciar el alto número de muertes que ocurren todos los años por la nula atención a la salud de las personas que viven en las inmediaciones del río Santiago, el canal del Ahogado, la rivera de Poncitlán y el lago de Chapala, que además de daño renal, han mostrado daño cerebral y malformaciones al nacimiento.