Guadalajara, Jalisco. 

Desde hace alrededor de seis meses hay una escasez total de medicinas para el dolor, en especial para quienes sufren cáncer, desde niños hasta adultos mayores (muchos de ellos en etapa terminal).

Se trata de tabletas de morfina que no se consiguen en Jalisco y prácticamente en ningún estado del país, informó el médico especialista en cuidados paliativos, Guillermo Aréchiga, quien labora en el Hospital de Zoquipan.

Tres médicos acudieron al Congreso del estado para solicitar el apoyo de los diputados Enrique Velázquez y Mara Robles, a fin de que la Legislatura apruebe hacer un llamado a la Comisión Federal para la protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris), para que agilice los permisos de importación, ya que las tabletas de morfina provienen sobre todo de Vietnam.

“La ausencia, la carencia de morfina en tabletas, tiene un desarrollo a la baja, es decir, ha habido una compra sustancial a la baja de los analgésicos, mientras que el proceso de envejecimiento, el crecimiento de tumores en niños y adultos, siempre va a la alza. De tal suerte que estamos estimando una disminución de 45 o 50% menos compras de medicamento analgésicos y especialmente morfina”, explicó.

Se calcula que en México hay 600 mil pacientes que requieren cuidados paliativos, entre ellos enfermos de cáncer, accidentes cerebrovasculares o padecimientos del riñón o neurológicos.

El diputado de Hagamos, Enrique Velázquez, refirió que también plantea que el Congreso de Jalisco proponga a la Cámara de Diputados y al Senado, se reforme la ley para autorizar la producción controlada y legal de opio para fines medicinales.

“México es el tercer productor de amapola en el mundo, después de Vietnam y Myanmar, seguiría México, sin embargo, aquí no hay una producción legal para poder tener los opioides y, por lo tanto, ayudarle a los enfermos terminales a aliviar su dolor, por lo tanto, esta política absurda de prohibicionismo que tenemos en México , que tiene que ver prácticamente con todas las drogas ha generado que en el sector salud, los anestésicos o la medicina del dolor, tengan una grave carencia en nuestro sistema de salud público y privado”, afirmó.

La legisladora de Hagamos, Mara Robles, señaló que también se pide al gobernador Enrique Alfaro, que atienda el tema y haga las gestiones necesarias para que los hospitales de Jalisco cuenten con las medicinas para el dolor que requieren los pacientes.

“En este caso concreto, donde está de por medio la vida de personas que están sufriendo de manera dramática, de manera terrible, el gobierno de Jalisco no diga ‘esta boca es mía’. Me consta el trabajo profesional, generoso de estos doctores y me consta que la diferencia entre la posibilidad de sobrevivir o no, está en que se controle el dolor”, expuso.

La propuesta que se presentó en la Oficialía de Partes del Congreso incluye hacer un llamado a la Secretaría de Economía federal, que revise la viabilidad financiera de legalizar la producción de amapola para la elaboración de fármacos controlados.

Mientras un paquete de 20 pastillas de morfina tiene un costo de 140 pesos, otras medicinas como la metadona cuesta 2 mil 700, aunque tampoco hay.