Es “violencia política”, caso de declinación de la alcaldesa de Tenamaxtlán para beneficiar a un hombre




Guadalajara, Jalisco.

Para Lupita Ramos Ponce, coordinadora del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres (Cladem) en Jalisco, el caso de Yolanda Meza Zepeda, quien declinó a su cargo de presidenta municipal de Tenamaxtlán, para permitir la llegada del síndico Gilberto Pérez Barajas, anulando el principio de paridad, es un claro caso de violencia política.

Incluso, está acreditado que durante la campaña proselista quien en realidad recorrió el municipio haciendo promoción para su persona como futuro alcalde, sin estar registrado como candidato, fue Gilberto Pérez Barajas, quien era aspirante a la sindicatura.

Por ello, el organismo ciudadano solicita la intervención del IEPC.

Ramos Ponce, incluso, dijo que el propio Cladem acudiría a Tenamaxtlán para acompañar y asesorar a Yolanda Meza y a su suplente, Citlalli Rodríguez Estrella, para que retomen el cargo y no se siente un mal precedente, en el que se burla la ley para ceder una presidencia municipal de una mujer a un hombre.


Ignacio Pérez Vega