Guadalajara, Jalisco.
Aunque la Organización Mundial de la Salud dio por terminada la emergencia de salud pública COVID-19 de preocupación internacional, la pandemia continúa y hay que permanecer en alerta, ya que el virus sigue circulando y matando a las personas, pero no solo eso, sino también por las secuelas que provoca, el Long Covid es una realidad.
La jefa técnica de la OMS, Maria Van Kerkhove reiteró que la fase de emergencia que duró tres años y medio ha terminado, pero el coronavirus sigue circulando, por lo que se debe aprender a integrar su control en los sistemas de salud pública de las naciones.
Recordó que el principal problema es que el virus sigue mutando, durante este tiempo de emergencia el COVID-19 mató oficialmente a 6.9 millones de personas y se registraron 765 millones de diagnósticos, pero según estimaciones de la propia OMS, teniendo en cuenta el exceso de mortalidad registrado en el planeta durante la pandemia, este coronavirus cobró la vida de 20 millones de personas en el mundo.
El director general de la OMS, Thedros Adanhom reiteró que la semana pasada, la COVID-19 causó una muerte cada tres minutos, mientras miles siguen luchando por sus vidas en unidades de cuidados intensivos y millones siguen viviendo con los efectos debilitadores del postcovid, por lo que la humanidad debe recordar lo aprendido.
Para los colectivos de la sociedad civil que hay en todo el mundo y que han cobrado fuerza como el Colectivo Covid Persistente México Comunidad Solidaria, estos mil 221 días, es decir tres años y medio que duró la emergencia de salud pública mundial es solo el inicio de la pandemia que sigue, el Long COVID o COVID persistente, incluso comparan el verdadero daño causado por el SARS-COV2 como un iceberg en donde se ve a simple vista el daño causado, pero debajo del agua hay una cantidad enorme sin cuantificar de afectados por esta infección.