Guadalajara, Jalisco.

Desde la pandemia, los maestros de educación básica y media superior han visto, de una manera acelerada, como se transforma su forma de enseñar y de medir logros y retos.

A decir de especialistas en salud mental, los profesores viven con altos niveles de estrés, pero también se ha registrado un mayor número de maestros con signos y síntomas del “BORN AUT” es decir, están quemados, muchas son las exigencias que deben cumplir no solo ante el grupo, sino antes y después, explica la jefa de Promoción y Prevención del Instituto Jalisciense de Salud Mental, Elodia Villar García:

“Nos hemos encontrado que el principal problema que están presentando los docentes ahorita es el estrés, entonces lo que nos piden mucho es como manejar el estrés, como ayudar a los maestros a manejar el estrés.

Vienen de una pospandemia que de pronto el estar trabajando en línea, más las actividades de las propias de las casas, los niños, etc., que eso vino a agudizar los problemas del estrés que ya tenían y se incrementaron y esto a la carga laboral y de pronto también a la mayor inquietud de los niños el problema de la atención.

No es lo mismo una dinámica en línea, a tenerlos físicamente, entonces el mayor problema es como manejar mi estrés y cómo evitar que ese estrés que estoy viviendo no transmitirlo a los alumnos, es la mayor angustia que nos comentan los maestros”.

También hay una gran preocupación por parte de los docentes de no saber qué hacer ante las crisis emocionales que están sufriendo los alumnos, quienes por cierto están presentando cada vez más problemas muy complejos:

“Si tenemos problemas de cutting, tenemos problemas de acoso escolar con casos muy fuertes, ha habido solicitudes en secundarias de las que llaman la atención, suicidios consumados, entonces cuando eso ocurre, dice la escuela, vengan”.

El SALME y la Universidad de Guadalajara realizaron un estudio en noviembre del año pasado con el objetivo de valorar el estado de salud mental, desgaste laboral y factores asociados de los maestros, con el objetivo de hacer un diagnóstico y proponer estrategias y herramientas para mejorar su calidad de vida y desempeño laboral.

En este estudio se analizaron 3 mil 344 personas, la mayoría son maestras, el resto varones mostrando una afectación en una o varias áreas del BORNAUT en la escala de Maslach.

El resultado más significativo fue la presencia de cansancio emocional, también se encontró pensamientos de muerte, y el consumo de sustancias psicoactivas, lo que evidenció la necesidad de mejorar las condiciones laborales y ambientales de los docentes de Jalisco.

La salud mental de la población en general, así como de los maestros, ha sufrido un cambio después de la pandemia, reconoce la especialista, antes recibían solicitudes para que acudieran a atender a alumnos a las escuelas, ahora se pide también la atención para maestros y hasta para el personal administrativo:

“El incremento se ha dado por más solicitudes para personal docente y para personal administrativo y antes nuestra población blanco era el alumnado, ahora es como sí atiéndeme primero al personal y luego trabajamos con los estudiantes y si involucramos a los padres de familia, pues también con ellos, pero sí ha habido más solicitudes para personal docente y administrativo y para todos los niveles”.

Para los especialistas en salud mental del estado, los adolescentes que actualmente cursan la secundaria fueron los más afectados con la pandemia y ahora están reflejando problemáticas mentales más complejas y que están poniendo en aprietos a los docentes.