Guadalajara, Jalisco.

El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, se excedió y violó el debido proceso con las declaraciones que difundió en sus redes sociales contra el ex secretario de Salud, Antonio Cruces Mada. Así lo advierte el investigador miembro del Observatorio sobre Seguridad y Justicia del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Rubén Ortega Montes.

El también académico explicó que, dada la etapa del proceso acusatorio contra Cruces Mada, las declaraciones del gobernador de Jalisco se exceden y son “contradictorias” a su nula reacción, incluso negación, de hablar sobre su relación con el empresario detenido en Puerto Vallarta por el asesinato del ex gobernador Jorge Aristóteles Sandoval.

El investigador Rubén Ortega agregó que Enrique Alfaro sí tiene que explicar el tema del empresario detenido por el caso de su predecesor, por transparencia y en aras de la justicia, pero también por congruencia y para quitarle peso a los señalamientos de revanchas políticas, porque si bien es cierto que hay elementos para vincular a proceso a Cruces Mada, no era necesaria la prisión preventiva porque, pese a sus amparos, el imputado nunca dejó de responder a sus citatorios.

“Él sí viola el debido proceso porque sale y habla de este ex funcionario como si ya estuviera declarado culpable, o como si estuviera marcando la línea el gobernador desde su celular para decir que hará justicia, que ahí están los hechos y que ya está detenido y con una prisión preventiva, en este caso, el vinculado a proceso. Yo creo que hay un exceso tanto del gobernador, que no es quién para haberla hecho, como lo viene siendo de la Fiscalía, contrasta con el silencio sepulcral que omite en el caso de Aristóteles".