Guadalajara, Jalisco.

Al dar a conocer el modelo nacional de policía y justicia cívica en el Colegio de Jalisco, la presidenta de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal y también alcaldesa de Escobedo, Nuevo León, Clara Luz Flores se pronunció a favor de la Policía Metropolitana, un enfoque que el Gobierno de Jalisco pretende consolidar en el Área Metropolitana de Guadalajara.

La alcaldesa indicó que este sistema metropolitano de seguridad debe ante todo fortalecer a los policías municipales, un proyecto que el municipio de Escobedo trabaja a partir de la capacitación continua y de especialización de los elementos.

La primera edil de una de las ciudades consideradas más seguras del país, indicó que el modelo de seguridad integral para la ciudadanía que se realiza en Escobedo plantea una policía con enfoque integral, basado en la capacitación, especialización, diagnóstico y también en la depuración del sistema.

Ante académicos y especialistas reunidos en Casa Jalisco, un espacio que fue también abierto para los encargados de seguridad de la metrópoli de Guadalajara, habló sobre la impunidad en México.

En la ponencia sobre seguridad 2019, éxitos y perspectivas de la seguridad municipal de México, la presidenta de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal presentó el modelo nacional de policía y justica cívica, cuyo objetivo es fortalecer la policía municipal.

El plan de autorización de dicho modelo será en diciembre y su funcionamiento arranca en el año 2020, antes en el mes de septiembre, las entidades federativas deben presentar un diagnostico municipal nacional de las capacidades del estado de fuerza de la policía.

En el enfoque donde hay mayor oposición entre algunos presidentes municipales es en el financiamiento del Fondo de Fortalecimiento Municipal, señaló la alcaldesa que el recurso se gasta en otros rubros, ahora con este modelo nacional se busca que, de los 84 mil millones de pesos, la mitad se ejerza exclusivamente para el fortalecimiento de las capacidades de los policías, esto es: capacitación, salario, premiaciones y el retiro de elementos que no pasaron exámenes de confianza o posiblemente estén involucrados con el crimen organizado.