Zelenski presiona a la UE por negociaciones de adhesión, ante oposición de Hungría
Fotografía: EFE/EPA/SERGEY DOLZHENKO




Bruselas, Bélgica.

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, urgió el jueves a los dirigentes de la Unión Europea, reunidos en una cumbre en Bruselas, a autorizar el inicio de negociaciones para la adhesión de su país al bloque, y les advirtió que no es momento para dudas.

Zelenski advirtió a sus homólogos europeos que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, se aprovecharía de un eventual fracaso de la cumbre.

"No le den [a Putin] su primera -y única- victoria de este año", les pidió.

Los dirigentes de la UE iniciaron una difícil cumbre para, entre otros temas, decidir sobre al inicio de eventuales negociaciones de adhesión con Ucrania, paso del que Hungría marcó distancia.

Al llegar a la sede de las reuniones, el primer ministro húngaro, Viktor Orban, afirmó que la UE no puede iniciar ahora negociaciones de adhesión con Ucrania.

"No hay razones para discutir nada, porque las precondiciones [impuestas a Ucrania] no fueron cumplidas (...) De forma que no estamos en posición de comenzar a negociar", afirmó.

Para Orban, "será necesario volver a este asunto más tarde", cuando "las precondiciones sean cumplidas".

Durante la cumbre los dirigentes deberían apoyar un informe de la Comisión Europea (el brazo ejecutivo de la UE) que recomienda iniciar las negociaciones de adhesión con Ucrania y Moldavia.

  • Además de la ampliación, los dirigentes deberían dar luz verde a un nuevo paquete de ayuda financiera a Ucrania por 50.000 millones de euros (más de 54.000 millones de dólares).

Esta discusión ocurre en momentos en que aumentan las dudas sobre la continuidad del respaldo de las potencias occidentales a Ucrania en su guerra contra Rusia, que comenzó en febrero de 2022.

Al llegar a la reunión este jueves, el jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, dijo que el apoyo del bloque a Ucrania es una "cuestión existencial".

"Creo que Ucrania ha realizado un trabajo increíble para cumplir con las condiciones" que le fueron presentadas, dijo Borrell.

- Unidad europea en juego -

El bloqueo de Hungría a la apertura de las negociaciones con Ucrania arrojó una densa nube de incertidumbre sobre la cumbre, además de una fuerte presión sobre los mandatarios.

En una carta a Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, Orban llegó a pedir formalmente que la cuestión de Ucrania sea excluida de la agenda de la cumbre, para evitar un fracaso por la ausencia de consenso.

Sin embargo, en la tarde del miércoles, en la víspera de la cumbre, la UE anunció el desbloqueo de pagos a Hungría por hasta 10.200 millones de euros (unos 11.000 millones de dólares) que habían sido congelados por dudas sobre el funcionamiento del Estado de Derecho en ese país.

Este jueves, el primer ministro de Irlanda, Leo Varadkar, admitió que el desbloqueo de pagos coincidió con un momento inoportuno, pero descartó que esté relacionado con la postura húngara sobre Ucrania.

"La percepción es que se trata de algún tipo de incentivo para lograr que Hungría apoye ciertas posiciones (...) Pero en realidad ese no es el caso", afirmó.

El primer ministro de Grecia, Kyriakos Mitsotakis, dejó claro al llegar a la reunión que su gobierno "apoya la propuesta de la Comisión Europea sobre ampliación [del bloque], en especial con la necesidad de iniciar conversaciones" de adhesión con Ucrania.

La sensibilidad de la discusión sobre la ampliación del bloque y la adhesión de Ucrania es tan espinosa que fuentes diplomáticas no descartan que la cumbre pueda extenderse incluso hasta el sábado.

El Consejo Europeo debería también conceder el estatus formal de país candidato a la adhesión a Georgia, al tiempo que Bosnia aún tendría que cumplir con las precondiciones iniciales para que las negociaciones de adhesión puedan comenzar.

Aún si los mandatarios europeos deciden abrir negociaciones de adhesión con Ucrania y Moldavia, el proceso normalmente tarda varios años en los que se extienden las conversaciones y se implementan reformas, y en algunos casos pueden durar más de una década.