Violencia machista, la deuda con las mujeres en el primer año de Sheinbaum
EFE/ Mario Guzmán




Ciudad de México.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cumple un año de Gobierno en un país atravesado por la violencia machista sin ofrecer un plan real ni un presupuesto suficiente para combatirla, pese a haber hecho de la igualdad de género su bandera para llegar al poder, según advirtieron a EFE activistas feministas.

  • Con frases como “No llego sola, llegamos todas» o “Es tiempo de mujeres”, Sheinbaum ha sido aplaudida desde que asumió el cargo el 1 de octubre de 2024 como la primera mujer presidenta en la historia de México, aunque un año después, sectores del movimiento feminista exigen recursos, estadísticas transparentes y un plan efectivo para frenar la violencia feminicida.

En su primer informe de Gobierno presumió una reducción del 34 % en los feminicidios entre septiembre de 2024 y julio de 2025, pero lo hizo sin detallar por qué y cómo se lograron estos resultados no vistos en muchos años, señaló Luz Estrada, directora del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF).

La realidad, afirmó Estrada, es que el dato de que 11 mujeres son asesinadas al día “sigue vigente”, ya que “en México se asesinan más de 3.000 mujeres al año”, además de que solo el 25 % “se logra investigar como feminicidio”.

Las desapariciones de mujeres se han disparado hasta un 200 % en algunas regiones del país, como el sureño estado de Tabasco, donde en 2025 se registraron 1.761 casos, mientras que en 2024 hubo 236 reportes en el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO).

“Siguen asesinando a muchas mujeres”, alertó Estrada y recapituló que desde el OCNF se han solicitado análisis para identificar patrones en los crímenes y desapariciones, sin obtener respuestas del Gobierno.

Violencia machista, la deuda con las mujeres en el primer año de Sheinbaum

EFE/ Mario Guzmán

Datos “tramposos”

También explicó que en México los datos “no pueden ser el parámetro” para argumentar que esta violencia está cediendo, porque las fiscalías locales no tienen un “criterio claro” al alimentar el banco de datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, cada una “sube los datos como considera”.

Para la especialista, esta recaudación de cifras, que representan vidas humanas, es “tramposa” y se presta a la “manipulación”, y le preocupa además que este argumento de “disminución” sea el pretexto para eliminar programas que salvan de la violencia a miles de mujeres.

Por ejemplo, el OCNF ya ha notado un “abandono” de la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM), el único mecanismo que ha logrado “sentar a las autoridades” para revisar sus políticas de atención a la violencia contra las mujeres y que debe dar “seguimiento” la Secretaría de las Mujeres, creada por Sheinbaum.

“La misma presidenta plantea que es tiempo de mujeres, yo todavía esta frase no la veo aterrizada”, lamentó Estrada.

Violencia machista, la deuda con las mujeres en el primer año de Sheinbaum

EFE/ Mario Guzmán

‘El presupuesto no es feminista’

Esta postura la comparte Wendy Figueroa, directora de la Red Nacional de Refugios, quien sostuvo que el presupuesto aprobado para 2026 era la oportunidad de Sheinbaum para demostrar en este primer año que había “un compromiso con la igualdad, los derechos humanos y las mujeres”.

Lamentablemente, expresó, “el presupuesto no es feminista” y es un claro ejemplo de que “no llegamos todas”, porque la estrategia es más bien “partidista” y se centra en “inflar los números para los programas asistencialistas”, llamados del Bienestar y creados inicialmente por el expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024).

El presupuesto 2026, en el anexo 13 -destinado a la igualdad entre hombres y mujeres- el 50 % está dirigido a programas del Bienestar, que no están enfocados en “eliminar las brechas de desigualdad o garantizar la igualdad sustantiva”.

Para Figueroa, el gobierno de la mandataria parece un “déjà vu” con el de su predecesor, así lo demostró cuando eliminó del presupuesto actual a los refugios, que “salvan la vida de miles de mujeres y previenen feminicidios”, misma acción que arremetió López Obrador en 2019.

Por ello, consideró urgente que los resultados traspasen el discurso y empiecen a notarse antes de que impere “la simulación”, que es otra cómplice de la violencia.

“La simulación puede alcanzarnos no solamente el siguiente año, sino todo el sexenio”, concluyó.

Ana Báez y María Julia Castañeda