Laura Esquivel, magia y realidad
La escritora mexicana Laura Esquivel cumple 75 años. EFE/Giorgio Viera.




Ciudad de México.

El 30 de septiembre de 1950 nació una de las voces más leídas de la literatura mexicana contemporánea, autora de la novela `Como agua para chocolate´ y una mujer comprometida socialmente con su país, compromiso que la llevó a incursionar en la política como diputada federal.

A los niños dedicó sus comienzos profesionales después de formarse como educadora y especializarse en teatro infantil. La escritura sería lo siguiente.

Si bien su obra se asocia con el realismo mágico, Esquivel lo presenta como algo "normal y cosa de todos los días" en México, en lugar de una técnica literaria.

Su trabajo se sitúa en un periodo de evolución cultural en México y es fundamental para entender la participación profesional de la mujer en la literatura desde finales de los ochenta. 

Laura Esquivel, magia y realidad

Si bien su obra se asocia con el realismo mágico, Esquivel lo presenta como algo "normal y cosa de todos los días" en México, en lugar de una técnica literaria. EFE/Giorgio Viera.

Literatura

La escritora pertenece al movimiento ‘Postboom hispánico femenino’ junto a otras colegas vinculadas por la edad, el éxito editorial, la accesibilidad de sus obras al gran público, su relación con el periodismo y, en muchos casos, el cuestionamiento por parte de la crítica de la calidad literaria de sus novelas. 

Ángeles Mastretta, Elena Poniatowska, Isabel Allende, Luisa Valenzuela, Ana Lydia Vega, Gioconda Belli y Carmen Naranjo, destacan entre otras.

A instancias del que era entonces su marido, el cineasta mexicano Alfonso Arau, Esquivel se introdujo en la creación de guiones cinematográficos, debutando con el guion de la película “Chido One, el Tacos de Oro”. 

Pero su gran éxito y por lo que es conocida mundialmente es por “Como agua para chocolate” (1989), llevada al cine por Arau en 1992 con guion de la propia autora.

Una novela que combina realismo mágico, recetas de cocina y, por encima de una trama de amor, una historia de las complejas relaciones fraternales y materno-filiales que existen entre las mujeres de una familia de hacendados en la primera mitad del siglo XX.

Se tradujo a decenas de idiomas y la novela recibió el premio American Bookseller Book of the Year 1994 en Estados Unidos, concedido por primera vez a una autora extranjera.

Laura Esquivel, magia y realidad

Su gran éxito y por lo que es conocida mundialmente es por “Como agua para chocolate” (1989). EFE/Sáshenka Gutiérrez

Aquellas primeras ideas de la obra se repetían en ‘Íntimas suculencias’ (1998), recopilación de cuentos que acompañan a recetas de cocina, donde la autora insiste en su máxima de que "uno es lo que se come, con quién lo come y cómo lo come". 

Le siguieron “Estrellita marinera” (1999), “El libro de las emociones” (2000) y “Tan veloz como el deseo” (2001). En ésta, el amor y la figura paterna, como eje central del argumento, es otra vez el tema principal de la obra.

También “Malinche” (2004), “A Lupita le gustaba planchar” (20014), “El diario de Tita” (2016) y “Mi negro pasado” (2017), segunda y tercera parte de la trilogía de “Como agua para chocolate”. 

  • A Esquivel se la valora asimismo por su habilidad para abordar temas sociales como la formación femenina y el legado cultural mexicano. Utiliza un lenguaje que evoca lo cotidiano y lo "mágico" mexicano, la creación de atmósferas sensoriales, y la exploración de la genealogía femenina y la vida doméstica.

Compromiso social

Hubo un tiempo en el que en su vida también hubo espacio para la Política. Tras ser directora general de Cultura en Coyoacán durante varios años, fue diputada federal por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que creó el que más tarde sería presidente del país Andrés Manuel López Obrador (de 2018 a 2024). 

Un período aleccionador para Laura Esquivel como bien expresaba en una entrevista para el diario español ‘El País’ en 2021:

“... aprendí mucho y fue una experiencia interesante. Formé parte de la primera bancada de Morena. Éramos un grupo de personas, la mayoría sin experiencia política, con un deseo de cambio y de dar lo mejor de nosotros. No teníamos estos vicios ni estos juegos de interés político, de te doy para que me des”.

Sin embargo, todo va cambiando, la sociedad, nuestra percepción de las cosas... 

“Pero ahora, después de esa experiencia y de ver lo que pasa en el mundo...”, siguió diciendo… “te soy sincera: no creo mucho en la democracia ni en la política. El mundo cambió y estas estructuras se van a empezar a desmoronar porque tienen que ver con una forma de pensamiento individualista, competitiva”.

Laura Esquivel, magia y realidad

A Esquivel se la valora por su habilidad para abordar temas sociales como la formación femenina y el legado cultural mexicano. EFE/Juan Carlos Hidalgo

Por el contrario, la escritora y exdiputada veía interesante la ‘sociocracia’, movimiento que surgió en Países Bajos y por el que se sentía atraída. “… se trata de cambiar la estructura de gobierno vertical… creo que tenemos que buscar una nueva forma de organización comunitaria, crear comunidades sostenibles y sustentables”. 

Ya en 2012 en otra entrevista al mismo diario manifestaba: 

“...es inminente un cambio de conciencia planetario, no solo local… Tenemos la responsabilidad como seres humanos de trabajar en favor de todos”.

Y así, entre las letras y la política ha forjado su existencia, 75 años, de momento.   

MATILDE ALONSO.