Guadalajara, Jalisco. 

La realidad que el presidente de la República intenta imponer todos los días en la que sólo hay dos bandos, es mentira. México tiene una gran diversidad de opiniones y expresiones políticas que se intentan suprimir con esa retórica desde el poder, señala José Woldenberg, Consejero Presidente del IFE de 1996 a 2003, en el programa número 100 de #ConversacionesConMauricioMerino de Canal 44:

“Creo que sí deberíamos estar preocupados por la polarización retórica que ha impuesto el Presidente. En primer lugar, porque es artificial, porque no es cierto que solamente existan dos posiciones políticas en el país; un país de las dimensiones, la complejidad, la masividad, la modernidad de México no puede ser alineado en conmigo o contra mí. Ese es el intento machacón del presidente.

Esa fórmula además nos ha privado a todos, incluido al presidente, de poder tener un espacio público realmente productivo (…) los problemas de este país son realmente muy profundos y muy difíciles, y este alineamiento retórico, lo que no permite, es la emergencia de los diversos diagnósticos y propuestas que hay sobre los muy diversos temas porque el presidente de la República no está acostumbrado al debate”.

México debe resistir para no volver a tiempos autoritarios, pese a que desde la Presidencia se quiera alinear a todos en un mismo discurso. Por fortuna siguen existiendo múltiples instituciones y organismos con causa y trabajo por la democracia, considera Woldenberg:

“Hay un archipiélago de organizaciones civiles que no han desaparecido, ni van a desaparecer porque tienen agendas propias, diagnósticos y causas. Hay todavía un Instituto Nacional de Acceso a la Información Pública, hay universidades públicas y autónomas.

Es decir, yo sí creo que este gobierno podía alinear a todas esas instituciones y actores, a un solo discurso y a una sola política. Y creo que lo que se está jugando en estos meses y en los años por venir, es precisamente si México va a procesar su vida política en un marco democrático o si vamos a retroceder y se va a construir una institucionalidad autoritaria”.

A pesar de esto, "en las elecciones presidenciales de 2024 va a ganar quien decida el pueblo de México con sus votos que se deben respetar, hoy nadie debe anticipar victorias, ni siquiera el partido en el poder", afirma José Woldenberg, experto en temas electorales y Doctor Honoris Causa por la UdeG.

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