Por Tatiana Sánchez
Durante los primeros cuatro meses de este 2018 el precio de la gasolina ha sido un tema recurrente no sólo en Lagos de Moreno sino en todo el país. En diversos momentos, académicos, empresarios, comerciantes y consumidores han externado su descontento con el alza en el precio del producto.
Y es que tan sólo el pasado fin de semana, en estaciones de gasolina de la Ciudad de México, el precio máximo de este combustible llegó a los veinte pesos. En lo que respecta a Lagos de Moreno, los aumentos también han sido considerables si bien se presentan en centavos; una situación que desde luego afecta a los consumidores, quienes comparten su opinión:
“A veces sube tres, a veces baja dos, y así está diario… tiene este baja sube, baja sube, así está diario, a veces sube dos centavos, a veces baja uno, a veces sube cuatro y así andan los precios ahorita”.
“Siempre ha tenido un incremento, acaba de incrementarse a 18 con tres centavos, a 18 con cinco centavos en otras, entonces sí ha subido, pero ha sido gradualmente a proporción en centavos”.
“Sí se han elevado bastante, nada más es lo que sí te puedo decir, en lo que es el queso, la leche, todo ese tipo de cosas, el pan, ha afectado bastante, ya ves que ya no te rinde igual el dinero”.
“Sí, automáticamente está aumentando unos cuantos centavos pero va en aumento y aparte los proveedores ya no dan el crédito que antes otorgaban, el plazo ya no lo dan, ahorita ya es de contado, ahorita y en la actualidad el comercio está muy competido”.
Y es que si bien en noviembre del año pasado se estableció por parte de la Secretaría de Hacienda la liberación de los combustibles, aprobando que otras empresas entraran al mercado para ofrecer sus servicios, los precios de la gasolina no han disminuido. Por el contrario, han ido en aumento y seguirán así por lo menos en lo que queda de este año, tal como lo explica el doctor Martin Romero Morett, jefe del Departamento de Economía del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas de la Universidad de Guadalajara:
“Los precios no van a bajar, porque si hay pocas y los dueños se ponen de acuerdo en el precio, ellos no van a bajar el precio. En lugar de que entren y ofrezcan un precio más bajo para ganarse los clientes, ofrecen precios más altos. Desafortunadamente la gente se va con la novedad, pero si así somos de malinchistas, ¿qué le vamos a hacer?”.
Por otro lado, el señor Salvador Macías, despachador en una gasolinera, comparte que aunque el precio ha ido en aumento, la demanda de los consumidores se ha mantenido en los últimos meses, pues como comenta, se trata de un producto necesario tanto para el transporte de mercancías como para poder trasladarse de un lugar a otro:
“En el sector rural la gente sigue consumiendo igual o poquito más que en el sector de aquí de la ciudad. sí ha disminuido, sí les ha pegado muy fuerte a la clase popular porque si antes cargaban cien ahora cargan cincuenta, hay mucho promedio de cincuenta pesos, ¿Por qué? porque no les alcanza”.
“Como ya saben que siempre lo compramos nosotros, siempre estamos ahí, ¿te acuerdas el otro año que no había gasolina?, estábamos haciendo fila, peleando por la gasolina…, ellos ven que de todos modos vamos a comprar y pues lo hacen, es igual que como con las tortillas, al canasta básica siempre nos lo suben”, añade un consumidor.
Es importante recordar que, como apuntaba el doctor Romero Morett, en este tema no habrá avances considerables hasta que se establezca un precio accesible y estándar que se respete en cada región, pues de otra manera cada empresa continuará ofreciendo diferentes precios.