San Juan de Dios, “vivo y de pie”, afirman comerciantes que reabrieron sus puestos
Fotografía: Ignacio Pérez Vega




Guadalajara, Jalisco.

El Mercado San Juan de Dios “vive” y “está de pie”. Ese es el mensaje que lanzan los comerciantes que reabrieron desde el domingo sus locales, en la zona que no se dañó tras el incendio del jueves 31 de marzo.

María Esther López Gutiérrez es comerciante de huaraches desde 1958. Relató que a ella le tocó el incendio de 1972 y ahora fue testigo del fuego que afectó a 426 locales. Y así como se sobrepuso al de hace 50 años, ahora el mercado “se levantará”.

El local de María Esther no se afectó y, aunque ya reabrió, este lunes prácticamente no tuvo clientes.

“Ahora nos permitieron entrar a las 11 y ya empezamos, ahorita empezamos a sacar. Sí hay poca gente, tiene temor de que esté quemado o que se vaya a quemar de nuevo San Juan de Dios, pero no: San Juan de Dios vive y todo está abierto. Es 15% el afectado y el 85% está abierto para que se venga toda la gente a comprar, desde agua fresca, hasta agujas… lo que quiera. Aquí los esperamos”, expresó.

Los comerciantes ambulantes que venden sus productos en los pasillos del mercado también regresan poco a poco, como Marisela Aceves Eusebio, quien vende cremas y ungüentos desde hace 35 años.

“Vine a trabajar porque nos dijeron que podíamos regresar y hay que darle vida al mercado, porque si no nos arrimamos tanto los locatarios como los ambulantes, el turismo no se arrima, porque tienen miedo. Yo les pido a todos que se arrimen. El Mercado San Juan de Dios no se va a morir; este tiene para muchos años tanto para las familias que trabajan aquí como para los vendedores ambulantes”, señaló.

José Alfredo Carrillo vende ropa típica en el Mercado San Juan de Dios desde que abrió sus puertas en 1958 y dijo que poco a poco regresarán los clientes.

“Sí nos va a afectar las ventas porque viene gente, pero muchas veces viene por el morbo de ver cómo quedó el mercado. Gente que venga a comprar, muy poca ha llegado, pero tenemos fe, primeramente Dios, que se vaya componiendo poco a poco. Decirles que no hay peligro, que vengan a comprar y que nos ayuden para poder echarles una mano a nuestros compañeros damnificados”, indicó.

Este martes comenzará la instalación de los 426 comerciantes afectados en los alrededores del mercado y en el patio central.


Ignacio Pérez Vega