Guadalajara, Jalisco.
Con la pandemia, se han registrado atropellos laborales en Jalisco. Se han dado despidos ilegales, se exigen que los trabajadores firmen sus renuncias para no pagar indemnizaciones, se ha aplicado reducciones salariales de entre 50 y 75% y todo ante la indiferencia de las autoridades estatales y federales.
Así lo señala en una carta pública diversas organizaciones civiles, entre ellas el Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal), la Red en Defensa de las y los Trabajadores por sus Derechos y su Salud y el Colectivo de Reflexión Universitaria (CRU-UdeG).
Como ejemplos señalan el caso de los 70 trabajadores de la maquiladora de ropa de la marca André Badi, que tiene plantas en Tepatitlán y Atotonilco, a quienes desde el 15 de mayo no se les pagan sus salarios, al suspender actividades.
Otro problema se vive en las maquiladoras de la industria electrónica, Sanmina, Jabil, Flex y Benchmark, en donde en las tres semanas recientes, trabajadores que estaban en resguardo domiciliario por la pandemia, los han llamado a esas empresas para que firmen su renuncia.
El Grupo Recal, empresa armadora de estructuras de acero, ubicada en el corredor industrial de El Salto, despide trabajadores, con la anuencia del sindicato afiliado a la CROC.
Por ello, las agrupaciones exigen a las secretarías del Trabajo federal y estatal que protejan la salud de los empleados y que impidan los atropellos laborales hacia el personal.