Por la fuerza, disuelven manifestación pacífica en el Parque Huentitán
Fotografía: @17MIRAMONTES/Twitter




Guadalajara, Jalisco.

De madrugada, y en 17 patrullas, policías estatales y de la Fiscalía estatal desalojaron el predio de resistencia en el Parque Huentitán ocupado desde hace más de 140 días por unos 20 estudiantes y vecinos de la zona.

El líder de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) y algunos estudiantes más fueron retenidos e incomunicados por un par de horas. La acción policial, supuestamente respaldada por la orden de un juez, se dio a las 3:30 de la mañana.

Uno de los estudiantes dijo que de pronto vio cómo dos personas con ropa oscura y armados entraban forzando una malla ciclónica. Intentaron reaccionar, corrieron a los accesos y se encontraron rodeados por 17 patrullas de la Policía estatal y la Fiscalía, acompañados por un agente del Ministerio Público, quien dijo llevar consigo una orden de un juez.

Javier Armenta, presidente de la FEU, comentó: “imagínense abrir los ojos y ver qué te están apuntando con un arma de fuego, así desperté hoy”.

Les quitaron los teléfonos y se los apagaron, pero algunos alcanzaron a llamar a compañeros y a subir videos, lo que alertó a quienes este día les tocaba dormir en casa y se hicieron presentes.

Vecinos y estudiantes intentaron ingresar, pero solo forcejearon con los policías, quienes les negaron el acceso.

El visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) que se hizo presente dijo que no habría detenidos, pero al lugar arribaron más elementos de Fiscalía y antimotines, quienes vigilaban cómo los desalojados se retiraban con sus objetos personales más valiosos, que fue lo único que les permitieron sacar.

Trascendió que la acción legal fue promovida por la empresa que tiene la posesión del predio donde se construirán torres de departamentos en vez de un parque -Como lo quieren los vecinos- y que el juez giró la orden de desalojo cerca de la medianoche del miércoles.

El presidente de la FEU recriminó el uso de armas de fuego para reprimir una resistencia que en estos cinco meses sembró árboles, dio talleres y realizó otras actividades con los vecinos.