Guadalajara, Jalisco.

El tiradero de basura de Picachos, situado en el kilómetro 19 de la carretera a Colotlán, ya cumplió su vida útil. Se construyó en 1999 y a finales de ese año comenzó a recibir la basura de Zapopan, con una vida útil de 12 años.

Por ello, el colectivo Pueblos de la Barranca, hizo un llamado a los alcaldes de Guadalajara, Tonalá, El Salto y Tlajomulco, que recién se reunieron, a fin de que busquen otro sitio para depositar los residuos de la ciudad, advirtió el vocero, José Casillas Martínez.

El alcalde de Zapopan, Juan José Frangie, informó que en las próximas semanas comenzará la construcción de dos nuevas celdas o depósitos para recibir la basura metropolitana, pero eso va a colapsar el sitio, aseguró José Casillas, quien rechazó las palabras de Frangie, quien asegura que en Picachos no hay generación de lixiviados o jugos tóxicos de la basura.

“Es muy difícil poder tapar los escurrimientos de lixiviados con declaraciones. En realidad, el basurero ya venció su vida útil y lo que conminamos a los alcaldes de la zona metropolitana, es que busquen un lugar más adecuado y que se haga de verdad un verdadero tratamiento de los residuos sólidos, porque ahí lo único que están haciendo es amontonándolos y tirándoles capas de suelo. Además, haciendo con ello que escurran los lixiviados a las cuencas. Claro que sí hay lixiviados, vamos, yo los invito a que hagan un recorrido”, explicó.

Picachos tiene una superficie de 70 hectáreas y ahora que pretenden construir dos nuevas celdas para depositar basura, los habitantes de los pueblos de la barranca están preocupados, porque a ellos nadie les ha consultado si avalan o rechazan que se extienda el periodo del relleno sanitario, después de 2023.

“La vida útil terminó en 2012. Cuando hicieron el primer estudio, decían que tenía una vida útil de 12 años y ya lleva muchos más. A finales de 1999 comenzó a recibir basura, ya tiene más de 22 años funcionando, pero nosotros desde 2009 que nos manifestamos, les demostramos que ya eran incapaces de controlar la fuga de lixiviados. Están construyendo nuevas celdas, pero el punto es que ya ni siquiera espacio tienen. Han tenido que destruir parte del bosque para poder armar los espacios ahí”, expresó.

El tiradero privado de la empresa Hasar´s, situado junto a Picachos también está saturado. Ahí se tira la basura del Ayuntamiento de Tlaquepaque.

Los pueblos de la barranca afectados por los tiraderos de Picachos y Hasar´s, son entre otros La Soledad, San Lorenzo, Ixcatán, Huaxtla, Paso de Guadalupe y San José.