Perú realiza megaoperativo de requisa en cárceles tras ofensiva del narco en Ecuador
Esta imagen publicada por el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) muestra a agentes que contienen a reclusos mientras realizan una búsqueda durante una operación de incautación a nivel nacional en la prisión Pampas de Sanaguillo en Tarapoto, Perú, el 11 de enero de 2024. (Foto por FOLLETO / INPE / AFP)




Lima, Perú

Perú realizó un megaoperativo de requisa en todas sus cárceles, donde se hacinan unos 94.850 presos, tras la violenta ofensiva de bandas criminales en Ecuador, informó el jueves el Instituto Nacional Penitenciario (Inpe).

"Queremos decirle a la sociedad que deben estar tranquilos, que mantendremos el principio de autoridad en los penales para evitar lo ocurrido en Ecuador", dijo a la radio RPP el jefe de la institución, Javier Llaque.

Ante la arremetida del narco en ese país, que llevó al presidente Daniel Noboa a declararle la guerra abierta a las bandas que operan desde los penales ecuatorianos, Perú activó las alarmas y movilizó a cientos de policías y militares a la frontera de 1.400 kilómetros.

En medio del megaoperativo ordenado por el gobierno peruano, agentes penitenciarios y policías ingresaron a las cárceles entre martes y miércoles.

  • Algunos presos fueron sacados a los patios con pantalones cortos, según imágenes del Inpe.

Las autoridades hallaron decenas de celulares en colchones y retretes, paquetes de pasta básica de cocaína y marihuana escondidos en zapatillas y teléfonos públicos.

El jefe de las prisiones descartó que existan armas y zonas bajo control de los criminales en las cárceles peruanas.

"En Perú no hay penal donde no podamos ingresar (...) Las cárceles han sido limpiadas desde hace mucho tiempo de armas", manifestó Llaque.

La requisa estuvo a cargo de agentes penitenciarios y la policía en las 68 cárceles de Perú, sobrepobladas con cerca de 95.000 presos.

Ubicado entre Colombia y Perú, los mayores productores de cocaína, Ecuador se ha transformado en los últimos tiempos en un nuevo bastión del tráfico de droga con una veintena de bandas enfrentadas por el control del territorio, pero unidas en su lucha contra el Estado.

  • Desde el domingo han intensificado su ofensiva con motines carcelarios, en los que han sido retenidos 178 funcionarios, y una serie de ataques con armas y explosivos que dejan al menos 16 muertos.

Noboa decretó el estado de excepción y sacó a los militares a las calles.