Inundaciones en Bali: el coste del desarrollo turístico desenfrenado
Foto por BAY ISMOYO / AFP




Denpasar, Indonesia

Con los ojos cerrados, Ruth Deidree Boelan reza junto a lo que era su casa en recuerdo de sus familiares muertos en unas recientes inundaciones en Bali, agravadas por el desarrollo turístico desenfrenado de esta isla indonesia.

"Todavía estoy en shock. Mi hermano, mi padre y mi madre fueron arrastrados por las aguas. La casa, que estaba a orillas del río, también "desapareció", declaró en medio de sollozos a AFP la joven de 28 años.

Estas inundaciones y deslizamientos de tierra, provocados por lluvias torrenciales, dejaron 18 muertos en la "isla de los dioses" y pusieron de relieve el daño ambiental causado por años de desarrollo urbano y turismo desenfrenados.

El auge turístico transformó el sur de la isla, que antes se caracterizó por su verdor. Dio paso a la creación masiva de empleos, pero también impermeabilizó las tierras que antes proporcionaban drenaje.

Al comparar imágenes de espionaje estadounidense desclasificadas de la Guerra Fría con fotos satelitales recientes, la startup TreeMap, a través de su proyecto Nusantara Atlas, visibilizó los drásticos cambios.

"Todo este terreno se convirtió en carreteras o edificios; el suelo ya no tiene la misma capacidad para absorber agua", explica David Gaveau, su fundador.

Más de 4,6 millones de extranjeros visitaron Bali en los primeros siete meses de 2025, una cifra superior a los 4,4 millones de residentes permanentes de la isla.

La infraestructura para alojarlos provocó una "conversión de tierras y una gestión urbana caótica, acompañada de una aplicación laxa de las leyes de uso del suelo", denuncia Made Krisna Dinata, director ejecutivo de la ONG local Walhi Bali.

  • Todo esto "dejó a Bali en una situación muy propensa a desastres", opina.

Precipitaciones récord

Según datos de la agencia meteorológica local, Bali registró precipitaciones récord el 9 de septiembre, especialmente en el distrito de Badung, donde se encuentran algunas de las atracciones turísticas más populares de la isla.

El gobernador de Bali, Wayan Koster, aseguró a AFP que "nunca se habían presentado lluvias tan intensas", pero concedió que los problemas de infraestructura también influyeron en las desastrozas inundaciones.

Las autoridades pondrán en marcha un estudio sobre las construcciones a lo largo de cuatro grandes cursos de agua, dijo el gobernador. "Si se infringen las normas, se tomarán medidas correctivas", prometió.

También se prevén regulaciones para proteger las icónicas terrazas de arroz de Bali de un mayor desarrollo urbanístico.

Además, la gestión de residuos supone un desafío adicional.

Según una investigación realizada en 2019, Bali produce 4.200 toneladas de residuos al día, de las cuales menos de la mitad se envían a vertederos, explica I Gede Hendrawan, profesor de la Universidad Udayana de Bali.

Si no se recogen o eliminan adecuadamente, estos residuos obstruyen ríos y alcantarillas, agravando las inundaciones, explicó a AFP.

Desechos

Las autoridades balinesas se preparan este año para cerrar un importante vertedero en la isla e instan a los hogares a gestionar mejor sus residuos orgánicos.

Sin embargo, Hendrawan lamenta que mucha basura corre el riesgo de acabar en la naturaleza, porque "todos nos enfrentamos (...) a la falta de un buen sistema de gestión de residuos".

El gobierno local trabaja con Yakarta para construir una planta de valorización energética de residuos, pero es poco probable que se materialice pronto, afirma Koster.

También es posible que el volumen de residuos aumente si se concretan los planes de abrir un segundo aeropuerto internacional en el norte de la isla, lo que, según las autoridades, busca impulsar el turismo en esta zona menos visitada.

El cambio climático también aumenta el temor a lluvias récord más frecuentes, ya que una atmósfera más cálida retiene más humedad.

"Si no resolvemos este problema (de gestión de residuos), en diciembre y enero, cuando llegue la temporada de lluvias, podemos temer un desastre mayor", advierte Hendrawan.