Aunque ya no como antes, el señor Felipe Pichardo vende globos en el jardín de los Constituyentes. Escucha el perfil laguense de esta semana
Por Luz Atilano
Dar un poco de alegría a los niños es el trabajo del señor Felipe Pichardo, quien se dedica a la venta de globos y de algunos juguetes elaborados a mano, en el Jardín de los Constituyentes.
Aunque oriundo de Doctor Mora Guanajuato, municipio conocido precisamente por este oficio, comercia su producto en Lagos de Moreno, donde radica por temporadas desde hace cerca de 10 años, sólo una parte de su vida, pues además de este oficio, que también fue el de su padre y el de algunos otros miembros de su familia, ejerce desde muy joven tanto la fabricación de algunos de los artículos, como su venta, en la que se inició tiempo después.
Los días festivos y vacaciones son los que dejan mejores ingresos y en los que no puede faltar, pues este es un trabajo que les permite vivir el día a día a él y a su familia, pese a que la situación ya no sea como años atrás, cuando estos juguetes eran os preferidos de los niños, y nos dice: “Pues va saliendo para medio vivir. Haga de cuenta que va quedando como si fuera un sueldito… no es mucho, han cambiado los tiempos, todo va cambiando. Antes sí, hace unos 30 años atrás, fue muy bueno pero ahora ya está muy competido, ya está muy avanzada la tecnología y hay muchas cosas, por ejemplo el juguete chino, que vino a desplazar al juguete mexicano, porque está muy inundado de todo eso”.
El señor Felipe lamenta que la situación económica no sea la mejor, pero él continúa con su labor día a día, un trabajo de toda la semana, de lunes a viernes desde las 9 de mañana hasta ya por la noche, incluyendo además el tiempo que dedica la fabricación de los juguetes.
Globos en el Jardín de los Constituyentes de Lagos de Moreno
“Toda esta base es manual, es trabajo que se hace en casa… por ejemplo este caballito de plástico lo hacen unas personas que se dedicaban a los globos y ya se retiraron pero se dedican a hacer juguete de plástico soplado. Como el caballito, también hay como seis tipos de juguete que se hacen, todos para la cuestión de los globos… y este, pues lo hago yo, esta figurita yo la hago a mano, de esponjita. Hay que ir ingeniándoselas con el juguete manual para que tenga más figuritas”.
Elabora figuras de animales de esponja, reguiletes, avioncitos, entre otros, trabajo entretenido y de mucha dedicación, logra cerca de seis figuras por cada tres horas los días que alcanza a dedicar tiempo para la fabricación.
A sus 64 años, el señor Felipe Pichardo continúa haciendo su recorrido por el jardín y en ocasiones también por algunas calles de la ciudad. Y comparte, aunque ya no le deja lo mismo que antes y aunque a lo largo de su vida tuvo otras ocupaciones como chofer, empleado en la construcción o en el campo, el oficio de globero le permite convivir y brindar diversión a los niños, algo que sin duda también disfruta, y finalmente nos dice:
“Pues hay ocasiones que no se vende, o muy poco. A veces dos, tres piezas de repente por ahí. No es pesado, pero sí hay que caminarle bajo el sol. Yo no reniego de mi trabajo, ahí la llevo, al contrario, me gusta, ¿para qué voy a decir que no?, mi trabajo me gusta”.