Guadalajara, Jalisco.
Los negocios situados sobre la avenida Enrique Díaz de León, en el tramo entre la avenida Hidalgo y Reforma, exigen que el gobierno de Guadalajara sea empático con las pérdidas económicas que han sufrido, tras el cierre de la avenida desde el 30 de septiembre a la fecha.
La avenida tiene ya casi tres meses en obras para ampliar banquetas y renovar el pavimento y les avisaron que las banquetas no estarán listas el 31 de diciembre, como les habían prometido.
Algunos han tenido caídas de hasta 90% en ventas y llegada de clientes. Incluso, denunciaron que ante la falta de señalamientos, varios peatones y ellos mismos han caído en las zanjas abiertas por la constructora.
La propietaria de un negocio que pidió no ser identificada, reveló que ya no tienen dinero para el pago de la renta, por lo que han solicitado apoyos económicos al alcade Pablo Lemus, para no verse obligados a cerrar.
“La verdad sí me ha afectado muchísimo, mis ventas han bajado hasta 40%. Como puede ver no hay gente pasando. Ayer tuve un accidente, me caí en uno de los pozos de la esquina (Juan Manuel) y de hecho ando vendada de mi pierna. Sí está afectando mucho la economía. Está muy difícil la situación económica. La obra comenzó a finales de septiembre y nos habían dicho que terminaba en diciembre, pero no creó. Como aquí afuera conmigo todavía falta que hagan una zanja en la banqueta para poder meter la tubería, ya que la luz, internet y el cable van a air subterráneo. Todavía les falta un ratote, no creo que terminen en diciembre”, se quejó.
Rosario Ramos, propietaria de una tienda de uniformes, informó que no tiene ventas. La zona está “muerta”, indicó.
“Nos dijeron que terminaban a finales de diciembre, pero ahora resulta que nada más es la calle, que la banqueta estará hasta finales de mayo. Son trabajos a medias que nos están perjudicando bastante. Aquí está en corto el Hospital Ayala, ellos son mis clientes y no quieren venir porque se ensucian, da flojera. Honestamente a cualquiera le da flojera ir a un lugar que está feo, sucio, no hay camiones, no hay libre tránsito en ningún sentido. Nos reciben los oficios, pero no nos dan una respuesta en concreto, no hay quien de la cara”, expresó.
Otra comerciante, relató que tiene 26 años con su negocio de estética y hoy está a punto de cerrar. Debe la renta, por las bajas ventas.
“Yo hasta ahorita no veo nada claro. Ni el Ayuntamiento, ni Obras Públicas, ni nadie se preocupan de nada. Todo es obsoleto por todos lados. Unos dicen una cosa y otras otra cosa. Yo creo que han caído entre 80 y 90% los clientes. Nadie quiere venir por las obras. no pueden pasar, diario se andan cayendo, si salgo un ratito, ya se cayeron dos o tres personas. Imagínese. La verdad ha afectado a todos muchísimo, en general. Ayer se cayó un señor allá en la esquina, otra muchacha en la otra esquina y así sucesivamente sigue cayendo la gente”, expuso.
Los comerciantes anunciaron que en los siguientes días podrían realizar una manifestación de protesta.