Sölvesborg, Suecia
"Ni siquiera me atrevo a pensar en ello". A cuatro jornadas del final del campeonato, el entrenador del Mjällby AIF, Anders Torstensson, quiere mantener la cabeza fría mientras su club tiene la posibilidad de ganar la liga sueca.
Con once puntos de ventaja sobre el segundo, Hammarby, el club con sede en Mjällby, una localidad al sur del país que no llega a los 1.500 habitantes, casi toca su sueño con los dedos: "Es mi club de origen y nací en el pueblo de Mjällby... ¡Sería algo increíble!".
"Con nuestras modestas instalaciones, un pequeño presupuesto, ¡Mjällby ha sido el 'outsider' del fútbol sueco durante muchos años!", sonríe este hombre de 59 años durante una entrevista con la AFP.
Este antiguo oficial del ejército, que luego fue director de un instituto, nunca ha estado lejos del Strandvallen, el viejo estadio con capacidad para 6.000 plazas con unas gradas azotadas por los vientos del mar Báltico, donde el equipo tiene su sede desde 1953.
Para muchos especialistas, su larga y variada carrera es una ventaja para este club de un pueblo de 1.379 habitantes en el sur del país, que lo contrató en 2023 con un contrato indefinido.
"Tengo más experiencia en la gestión de personas en muchas situaciones, no solo durante un partido o un entrenamiento", explica.
Cada mañana reúne al equipo, cuya media de edad es de 24 años, alrededor de un copioso desayuno, durante el cual detalla el programa del entrenamiento que se celebra en un terreno con vistas al mar y... ¡al camping municipal!
Ir "paso a paso"
El ambiente en esta población es muy tranquilo y relajado. La mayoría de los jugadores vive en Sölvesborg, la ciudad más cercana, y comparten traslados en vehículos modestos.
Todos están muy unidos, asegura el defensa finlandés Timo Stavitski: "Es un lugar pequeño, así que todos estamos en una situación similar y tenemos muchas cosas en común".
Club asociativo, como todos los clubes profesionales en Suecia, el Mjällby AIF está presidido desde hace diez años por el empresario local Magnus Emeus, quien ha saneado las finanzas del club.
"Tenía una estrategia bastante clara desde el principio: nunca se puede tener éxito en el campo mientras haya desorden fuera, y lo primero que hay que hacer es asegurarse de que las finanzas estén equilibradas", explica.
Pese a esta estabilidad financiera, el club sigue siendo un pequeño David en Suecia.
En 2024, presentó un presupuesto de 84,7 millones de coronas (casi 9 millones de dólares), casi ocho veces menos que el gigante Malmö FF, que ocupa el séptimo lugar en la clasificación y que esta temporada compite en la Europa League.
Emeus asegura no tiene sueños de grandeza: "Lo importante es no perder la cabeza y querer convertirnos en otra cosa: Mjällby es Mjällby, no es ni Malmö FF ni el Real Madrid".
Viajes en autobús
Una cosa es segura, este singular equipo pronto se enfrentará a rivales europeos, pero no podrá hacerlo en el Strandvallen, ya que no está homologado por la UEFA.
Es casi imposible que el Mjallby repita las gestas del IFK Gotemburgo, que ganó dos veces la Copa de la UEFA (1982 y 1987) y del Malmö FF, finalista en 1979 de la Copa de Europa (antecesora de la Liga de Campeones).
"Un objetivo razonable sería superar las eliminatorias" para llegar a la fase regular, estima el entrenador.
Stavitski se muestra más ambicioso: "Somos un club sólido, más fuerte que muchos otros en Suecia, y muchos otros clubes suecos que no son más fuertes que nosotros han tenido éxito en Europa, entonces ¿por qué nosotros no?".
- Antes, los jugadores del Mjällby deben hacer en autobús los algo más de 330 km que le separan de Gotemburgo, donde jugarán el lunes.