Guadalajara, Jalisco.

La administración del alcalde Pablo Lemus modificó el escudo de armas de la ciudad, lo que viola el Código de Gobierno Municipal de Guadalajara y la Ley sobre el Escudo de Armas del Estado de Jalisco, que establece que no pueden hacerse cambios y adiciones al escudo sin que lo autorice el pleno de regidores de forma unánime.

La regidora de Morena, Candelaria Ochoa Ávalos, denunció lo anterior e hizo un llamado para que se corrija tal situación, pues de lo contrario se hará valer el Código y se promoverán sanciones para el alcalde Pablo Lemus, ya que al escudo se le añadió un arco a la mitad que simula una sonrisa, semejante a la imagen que usó en campaña el candidato de Movimiento Ciudadano (MC) y eso no debe tolerarse.

Incluso, la nueva imagen se utiliza ya en la papelería oficial, dijo Candelaria Ochoa.

“¿En qué consiste ahora la modificación? La administración municipal agrega al escudo de armas de la ciudad una especie de arco invertido. Aquí está el convenio municipal que se firmó en seguridad pública, en donde en el escudo de armas está el arco invertido, logotipo que utilizó el actual presidente municipal en la campaña. ¿Creerá que la campaña no ha terminado? Se ha impreso papelería y se han enviado y recibido oficios en mi regiduría con dicha alteración”, explicó.

La regidora de Morena advirtió que no usará esa papelería oficial con el escudo modificado, por lo que hizo un llamado al presidente municipal a que rectifique y respete el escudo de armas de la ciudad.

“Por supuesto, no lo he utilizado y no lo utilizaré y llamo a que nadie, ninguna regidora y ningún regidor, y ni siquiera el presidente municipal, puede hacer un mal uso del escudo. Dichas acciones violentan la ley por cuatro razones. La primera es porque el escudo de armas es un símbolo oficial y no un logotipo de campaña”, dijo.

El escudo de armas de Guadalajara cumple justo hoy, 8 de noviembre, 462 años desde que el rey Carlos I de España lo otorgó a la ciudad.

El escudo de armas puede apreciarse en la Plaza Tapatía, en una escultura de bronce de tres metros de altura, elaborada por el escultor Rafael Zamarripa.