Guadalajara, Jalisco. 

Este año, el financiamiento público de los siete partidos políticos con registro en Jalisco es de 157 millones 911 mil pesos. Para que tengas una dimensión de lo que significa esa cifra, es el equivalente al presupuesto que tienen en conjunto los ayuntamientos de Autlán, Chapala, Atotonilco y Acatlán.

Y a eso hay que añadir el presupuesto del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) que ejerce 102 millones 617 mil pesos en 2022.

En suma, este año el sistema de partidos y el organismo electoral les cuestan a los jaliscienses 260 millones 528 mil pesos.

¿Te parece poco? Es exactamente la cifra que el Gobierno de Jalisco invirtió en su estrategia emergente contra la violencia en razón de género, y que se anunció apenas en marzo pasado.

¿Es cara la democracia en Jalisco? Eso lo responden los líderes y las dirigentes de los partidos políticos, la presidenta del IEPC y la coordinadora del Observatorio Político Electoral de la Universidad de Guadalajara (UdeG). Prácticamente, todos coinciden en que sí: es caro, sobre todo en un contexto de inflación y de crisis económica post-pandemia.

La coordinadora del Observatorio, Mónica Montaño, cree que debe revisarse el monto del gasto que se asigna a los partidos.

 “Pero si ese dinero se está gastando en quizás pautas personales, en promesas que luego no son realizables y en demás comunicación política que a veces no aporta a la construcción de democracia, pues ahí es donde tendríamos que revisar qué tanto dinero estamos destinando”. 

Quienes dirigen los partidos tratan de defenderse. Afirman que es caro sostener el sistema político en Jalisco, pero que sería más caro no tenerlo.

Habla Susana de la Rosa, presidenta del partido local Futuro, que este año ejerce 28 millones de pesos:

“Yo creo que una persona a pie, yo también vengo de ahí, soy ciudadana, no es que yo venga de otros partidos o ya haya tenido una experiencia de haber sido política en otros espacios, sí suena muy fuerte la cantidad de millones de pesos que se van en presupuesto público a partidos políticos. Sin embargo, ahora que ya llevo una experiencia de cinco años que me ha tocado estar al frente del partido, incluso construir el partido que yo presido, la verdad es que nunca es suficiente. Actualmente, nosotras recibimos 28 millones de pesos de presupuesto, eso es lo que tuvimos este año 2022”, explica. 

El presidente del partido local Hagamos, Ernesto Gutiérrez, admite que el dinero que se destina a los institutos políticos “es mucho”, pero explica por qué es necesario que exista financiamiento público. Este partido ejerce 30 millones de pesos.

“Sí, es caro, en el sentido de que es mucho dinero. A lo mejor, desde la óptica personal de una persona son cantidades que difícilmente vamos a ver juntos en la vida. En ese sentido, por supuesto que suena a que es caro, pero ahí la valoración real que tenemos que hacer es: ¿Qué sería más caro? Tener partidos políticos financiados por el presupuesto público o no tenerlos, ¿y eso que implicaciones tendría? En un resumen muy simplificado, sería básicamente la privatización de la participación política. El hecho de que exista financiamiento a los partidos permite que personas que tienen proyectos al margen de su estatus socioeconómico puedan participar en la política”, señala.

¿Estás de acuerdo con la justificación? Pues para el próximo año, los partidos políticos locales recibirán más de 10 millones de pesos más… y en el año previo a las elecciones.

Para 2023 se tiene previsto asignar 168 millones 283 mil pesos a los siete partidos políticos: PRI, PAN, MC, Morena, PVEM, Futuro y Hagamos. Esto significa un incremento de 6.5 por ciento.

José Manuel Romo, coordinador de Movimiento Ciudadano, indica que el dinero se ejerce en el trabajo político en todas las regiones del Estado. Ellos cuentan con 34 millones de pesos.

“Hay una serie de actividades que permanentemente nosotros promovemos en cada rincón del Estado de Jalisco, donde justificamos cada peso que gastamos, desde la renta, los sueldos, desde la gasolina que se gasta y está todo perfectamente transparentado”. 

El ex delegado de Morena, Favio Castellanos, quien recientemente dejó el cargo, se mantiene fiel a la postura de su partido a escala nacional: propone una reducción de 50% en el gasto político. Los morenistas ejercen 23 millones de pesos de tus impuestos para este año.

 “En Morena estamos convencidos de que la democracia no tiene que ser tan cara, se toca también el tema de que el INE no tenga lujos y no nada más el INE, sino todos los partidos políticos no tengan lujos, no tengan excesos, no tengan un derroche presupuestal y que realmente se utilice el dinero en la gente. Es recurso público que tiene que ser siempre para la gente”. 

Del PRI, la presidenta Laura Haro defiende las prerrogativas que salen del erario. El tricolor, que hace apenas seis años gobernó al país y al Estado, hoy tiene 16 millones de pesos.

 “Que la democracia cuesta, pero cuesta más caro no tener la democracia e instaurar una dictadura, como lo quiere hacer Morena en este país. No lo vamos a permitir bajo ninguna circunstancia y lo que nosotros hemos planteado en nuestra reforma electoral, los priistas, hemos hecho planteamientos muy claros, justo de reducir el financiamiento de los partidos políticos, pero también poner las reglas muy claras para el financiamiento privado, que hoy tiene todas las trabas, todos los obstáculos y yo creo que lo que se tendría que discutir primeramente es el financiamiento privado”, manifiesta.

En la segunda parte de este trabajo especial, la presidenta del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), Paula Ramírez, explica por qué es costoso el presupuesto de los organismos electorales.

Lee el especial completo de La democracia dorada