Lima, Perú.

El Congreso de Perú rechazó este viernes un nuevo pedido de destitución contra la presidenta Dina Boluarte, promovido por la izquierda opositora que alega una supuesta infracción constitucional por no dejar a un sucesor interino durante un viaje oficial a Brasil en 2023.

"Han votado a favor 28 congresistas, en contra 69, 6 abstenciones: en consecuencia, no ha sido admitida la moción de vacancia de la presidenta Dina Boluarte", anunció el jefe del Congreso, Alejandro Soto.

En la sesión participaron 121 de un total de 130 legisladores.

• Se requería de un mínimo de 49 votos para que la moción fuera admitida a debate, según el reglamento del unicameral Congreso.

Votaron a favor diversas bancadas de izquierda, mientras que lo hicieron en contra y se abstuvieron congresistas de las bancadas de derecha y extrema derecha, que controlan el parlamento.

El legislador Flavio Cruz, del partido Perú Libre, sustentó el pedido señalando que Boluarte incurrió en causal de vacancia tras haber viajado a Brasil en agosto de 2023 sin haber encargado el despacho presidencial a un funcionario.

Según el congresista izquierdista, el viaje de Boluarte "constituyó abandono de cargo y del despacho presidencial", una infracción a la Constitución que se sanciona con la vacancia.

Boluarte viajó a Brasil a la IV Reunión de presidentes del Tratado de Cooperación Amazónica (TCA), donde se abordaron temas sobre el medio ambiente.

La presidenta pudo ausentarse del país gracias a una ley que le permitía ejercer el cargo "a través de tecnologías digitales, de manera excepcional" en caso de viaje al extranjero.

La iniciativa contra Boluarte fue promovida por movimientos afines al expresidente Pedro Castillo, a quién el Congreso destituyó el pasado 7 de diciembre de 2022 tras un fallido golpe de Estado cuando intentó disolver el Legislativo y gobernar por decreto.

El pedido de destitución es el segundo que se presenta en el Congreso desde que ella llegó al poder, en diciembre de 2022.   

Bancadas de izquierda intentaron sacarla del cargo en abril de 2023 acusándola de ordenar la represión de las protestas que se desataron por la destitución de Castillo, que dejaron unos 50 muertos.

A sus 61 años, Boluarte, quien era vicepresidenta de Castillo, debe ejercer hasta julio de 2026.

A pesar del rechazo, los legisladores pueden seguir planteando mociones de destitución contra la mandataria. Castillo, quien ejerció su mandato por 17 meses, enfrentó dos pedidos de este tipo antes de su destitución final.