Guadalajara, Jalisco.
La colocación de bolardos sin consultar a comerciantes y locatarios del Mercado Lázaro Cárdenas, en el Centro de Zapopan, causa malestar. Ellos denuncian que no se siguió el debido proceso ni fueron consultados por la administración municipal, violentando el derecho a la información, a la consulta y a los planes parciales del municipio.
La y los comerciantes, Silvestre López, Ismael Sáenz y Rosalba Castro, exigen al Ayuntamiento de Zapopan informar y dar a conocer los estudios de impacto y las posibles afectaciones económicas que tendrían con la colocación de los bolardos y cierre de la calle Eva Briseño.
Con este tipo de actos, señala el vocero del despacho jurídico que lleva el caso, Rafael Hernández, se incurre en una serie de violaciones a las propias leyes y reglamentos municipales y estatal, al no seguir el debido proceso, lo que afecta a 600 familias de manera directa que dependen del comercio.
"Una decisión en que se actuó de manera unitaria y arbitraria, no se consultó, no se hizo una consulta, no hubo un estudio de impacto que analice cuáles son las consecuencias por la instalación de bolardos".
Los comerciantes piden un acercamiento con la administración municipal; en caso contrario, continuarán por la vía legal.