Guadalajara, Jalisco.

Opositores al programa Verificación Responsable del gobierno de Jalisco, realizan operativos “caza retenes”, para impedir que la Secretaría de Medio Ambiente estatal y la Policía Vial engañen a los automovilistas, ya que el programa en realidad está suspendido y el Gobierno de Jalisco quiere sorprender a los propietarios de vehículos para que paguen 500 pesos por la verificación de los autos.

Activistas de la Coordinadora Jalisciense de Asuntos Medio Ambientales, del grupo Desobediencia Civil y la Asociación de Talleres para las Emisiones y Reparaciones Vehiculares AC (Atervac) realizaron un boicot al “retén” que puso la Policía Vial en el cruce de las avenidas Patria y Río Nilo, en los límites de Guadalajara y Tonalá.

Esos “retenes” de socialización los realiza en forma periódica el gobierno de Jalisco para informar a los automovilistas que deben llevar sus unidades a los verificentros. Sin embargo, las agrupaciones se ponen metros antes con mantas en las que advierten:

“Cuidado, rateros más adelante”.

Abraham Gobel Gómez, presidente de Atervac, es uno de los que participa en los “caza retenes” y así explicó la actividad que realizan para avisar a los automovilistas que no se dejen sorprender.

“Aquí la idea de hacer este operativo es informarles a los pobres incautos automovilistas que los detienen, para poder invitarlos a verificar, que es una farsa, que aquí lo que están haciendo es incentivar, están incentivando al sector empresarial de los verificentros, para que vayan de manera voluntaria a verificar. Ojo, recuerden que ahorita no hay multas, no es obligatorio, no se cuenta con la infraestructura suficiente para verificar cuatro millones de vehículos”, explicó el manifestante.

Gobel Gómez dijo que el Congreso local, en forma abusiva, aprobó la ampliación a 19 años el programa de verificación, cuando el programa ya tiene tres años y ha sido un fracaso, pues no logra arrancar al 100% de lo que anunció el gobierno estatal.

Los opositores al programa Verificación Responsable advirtieron que seguirán “cazando retenes” y alertando a los automovilistas para que no sean partícipes de un negocio que impulsa el gobierno de Jalisco y que en realidad es un “impuesto disfrazado” de 500 pesos por llevar el auto a revisión a los verificentros.

Cuando los activistas llegaron al “retén” de socialización de Verificación Responsable, el personal levantó el punto donde retenían a los automovilistas y la acción concluyó.

Los manifestantes pidieron a la población “que nadie verifique, que nadie haga citas” y dijeron que si a alguien lo quieren multar, ellos van a impugnar por la vía legal esa sanción.