La poetisa María Baranda recibió el Premio SM de Literatura Infantil
Fotografía: Ignacio Pérez Vega




Guadalajara, Jalisco.

Por contar con una obra de amplio registro temático, la novelista, poetisa, traductora y psicóloga de profesión, María Baranda, de 57 años de edad, recibió el Premio Iberoamericano de SM de Literatura Infantil y Juvenil, dotado con 30 mil dólares.

Durante la Feria Internacional del Libro (FIL), el director general de la Fundación SM, Javier Palop, le entregó el premio a la mexicana María Baranda, quien ya antes ha ganado el Premio Nacional de Poesía Efraín Huerta y el Premio Nacional de Poesía de Aguascalientes.

“Su obra ha sido traducida a varios idiomas. Quizás no todos saben que ha sido traducida al lituano y al chino, entre otros idiomas y que su obra se ha publicado en Bélgica, Canadá, Estados Unidos, Reino Unido y en China. María le ha dedicado gran parte de su trayectoria a escribir libros de novela y poesía infantil y por ello ha sido reconocida por las más prestigiosos permios nacionales e internacionales que no mencionaré para no alargarme”, resaltó.

Irma Ibarra, escritora y representante de la Fundación SM, a nombre del jurado, dijo que eligieron a María Baranda, porque sus personajes retratan la complejidad humana con sus claroscuros.

“Sus libros propician el diálogo entre diferentes generaciones e identidades. Sus personajes retratan la complejidad humana, acompañan al lector y reivindican el lugar de los niños y las niñas en la sociedad”, explicó.

Emocionada por el premio, María Baranda, recordó que antes de los años 80, en México, los niños leían a autores extranjeros y de otras épocas, como Julio Verne o Emilio Salgari. Ahora, ella y otros autores le hablan a los niños de su entorno más cercano.

“No había escritores en nuestro idioma o eran muy pocos. Hasta antes de los años 80, leer libros para niños en México era conocer otras culturas, afirmarnos en realidades distintas y diferentes con las cuales sí establecimos muchos diálogos. Ahora, escribir para niñas y niños en mi país, significa hablarles de su realidad y de su entorno, con esta lengua nuestra que dice ajolote, tortilla, epazote, chícharo, que puede hablar del dolor de perder a la familia”, manifestó.

El poeta Eduardo Casar señaló que la obra de María Baranda se distingue por su originalidad y recomendó a todos leer su libro “El vuelo y el pájaro o cómo acercarse a la poesía”.


Ignacio Pérez Vega