Ingolstadt, Alemania

El fraude por la manipulación de motores costará el puesto a otro alto ejecutivo del grupo Volkswagen, señaló hoy el dominical alemán "Bild am Sonntag".

Se trata de Stefan Kirsch, miembro de la junta directiva del fabricante de coches de alta gama Audi, precisó el rotativo sin mencionar fuentes.

Kirsch asumió en enero el cargo de responsable de desarrollo en reemplazo de Ulrich Hackenberg, quien fue separado de sus funciones por su implicación en el escándalo de la manipulación de motores diésel para simular menores emisiones de gases.

Al parecer, las investigaciones encargadas por Volkswagen al despacho legal Jones Day arrojaron que Knirsch estaba al tanto del dispositivo ilegal montado en los motores de 3,0 litros de Audi y mintió en una declaración jurada al respecto.

Knirsch trabajó durante años para Audi y Porsche y dirigió desde 2013 el desarrollo de motores para Audi.

La noticia de su destitución coincidió con el primer aniversario del estallido del escándalo. Volkswagen admitió el 18 de septiembre de 2015 haber manipulado los motores de once millones de automóviles en todo el mundo para ocultar que sus emisiones de gases contaminantes superaban los límites permitidos.

El "Dieselgate" surgió en Estados Unidos, donde el mayor fabricante de automóviles del mundo afronta demandas multimillonarias del Estado y de particulares.

Analistas como Frank Schwope, del banco semipúblico germano NordLB, creen que la debacle ocasionada a raíz del escándalo de manipulación le podrá costar al productor automovilístico hasta 35 mil millones de euros (39.280 millones de dólares), además de incertidumbre durante años.