Unos 345.000 gazatíes se enfrentan a niveles catastróficos de inseguridad alimentaria, según la ONU
Omar AL-QATTAA / AFP




Roma, Italia.

Unos 345.000 habitantes de la Franja de Gaza enfrentarán niveles "catastróficos" de inseguridad alimentaria este invierno ante la reducción de la ayuda humanitaria, advierte la ONU en un informe publicado el jueves.

La cifra es muy superior a los 133.000 que actualmente se considera que están experimentando "una inseguridad alimentaria catastrófica", según el informe del Marco Integrado de Clasificación de la Seguridad Alimentaria (IPC).

Este texto es fruto del trabajo de expertos de oenegés y agencias de Naciones Unidas, incluida la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Según el informe, la ayuda alimentaria llegada este verano permitió mejorar la situación, pero la "fuerte disminución" de convoyes con bienes comerciales y ayuda humanitaria en septiembre debería invertir la tendencia.

"Este drástico descenso limitará en gran medida la capacidad de las familias para alimentarse y acceder a bienes y servicios básicos en los próximos meses", lamenta el IPC.

En consecuencia, la proyección es que el número de personas que podrían experimentar una inseguridad alimentaria catastrófica entre noviembre de 2024 y abril de 2025 llegará probablemente a 345.000, es decir, el 16 por ciento de la población en ese territorio palestino.

"Los suministros comerciales han disminuido, hay desplazamientos a gran escala, la infraestructura está diezmada, la agricultura ha colapsado y la gente no tiene dinero", dijo Arif Husain, economista jefe del Programa Mundial de Alimentos de la ONU.

El texto señala además que, "aunque estén menos pobladas, Rafah y el norte se enfrentan a una inseguridad alimentaria más grave", si bien todo el enclave está en crisis.

La directora general adjunta de la FAO, Beth Bechdol, pidió "restablecer inmediatamente el acceso humanitario para entregar ayuda alimentaria esencial y semillas a tiempo para la temporada de siembra de invierno de octubre a diciembre".

"La ayuda humanitaria no es suficiente. La gente necesita alimentos frescos y nutritivos", añadió.

Por su parte, el jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, denunció el miércoles una "caída drástica" del número de convoyes de ayuda alimentaria hacia el territorio palestino.

"El hambre en la Franja de Gaza se crea artificialmente" e Israel "impide activamente que los convoyes crucen la frontera", cuando no son "ciertos miembros del gobierno israelí los que hacen del hambre un arma de guerra", acusó Lazzarini.

  • El embajador israelí ante la ONU, Danny Danon, desestimó estas acusaciones, aseguró que se han transportado "más de un millón de toneladas de ayuda" al enclave palestino y acusó a Hamás de interceptar y robar los envíos.