Berlín, Alemania.

Asesores del Gobierno alemán, que dirige la canciller Angela Merkel, son partidarios de crear un "pasaporte climático" internacional que permitiría residir en Estados seguros a ciudadanos que se hayan visto obligados a abandonar su país de origen debido a los efectos devastadores del cambio climático.

Las emisiones de dióxido de carbono que se han dado por el momento van a elevar a largo plazo el nivel del mar en diez o más centímetros, explicó hoy en Berlín el investigador Hans Joachim Schellnhuber, miembro del Consejo Asesor Alemán sobre Cambio Global (WBGU) que asesora al Gobierno germano.

Junto a cuestiones como la reducción del gas de efecto invernadero, se debe por lo tanto pensar también en cómo se puede acoger a aquellas personas que pierden su país al verse afectadas por catástrofes naturales de las que no tienen culpa, señaló Schellnhuber.

En este sentido, propuso que países que generan grandes cantidades de gas efecto invernadero, como Alemania, deberían abrir sus puertas a los llamados "refugiados climáticos".

"Este pasaporte climático debe, en primer lugar, permitir el acceso y otorgar todos los derechos a países seguros de aquellas personas que viven en pequeñas islas que corren el riesgo de no ser habitables debido al cambio climático", recalcó el WBGU en su informe.

El Consejo Asesor Alemán sobre Cambio Global considera que el modelo que se debe seguir es el del pasaporte Nansen, que fue expedido tras la Primera Guerra Mundial a todos aquellos ciudadanos apátridas.

"Si tomamos en cuenta los estados insulares, estaríamos hablando de uno o de dos millones de personas", explicó el presidente del WBGU, Dirk Messner.

Desde el Gobierno alemán reaccionaron con cautela a la propuesta del consejo asesor. La ministra de Medio Ambiente germana, Svenja Schulze, señaló que se trata de un tema importante que debe ser abordado a escala internacional pero precisó que a ella le parece más importante avanzar en la lucha contra el cambio climático. "Esta es mi prioridad", recalcó la política socialdemócrata.

Desde el WBGU también proponen prestar ayudas a víctimas del calentamiento global para que puedan emprender acciones legales contra grandes empresas y contar con apoyo en procesos judiciales en el extranjero.