Conmemoran con música el 21 aniversario luctuoso del músico ocotlense Wilfrido Íñiguez




Ocotlán, Jalisco

La música de Wilfrido Íñiguez volvió a sonar en Ocotlán, Jalisco, tras 21 años de su fallecimiento, el arte del ilustre ocotlense resonó el los muros del Santuario del Señor de la Misericordia, en un encuentro de emociones, recuerdos, música y homenaje a uno de los hombres ilustres de la Ciudad del prodigio.

El maestro Willy como es conocido, falleció el 3 de diciembre de 2001, pero su legado permanece en el agradecimiento de sus alumnos y de un pueblo que año con año lo sigue recordando. Fue en 2015 cuando se comenzó a llevar a cabo un concierto musical para conmemorar el aniversario luctuoso del maestro, este 6 de diciembre se volvió a llevar a cabo.

Al respecto esto nos dijo el pianista Jorge Luis Godínez Castellanos, quien fue alumno de Wilfrido:

“Recordarlo es mantener vivo todo su legado, todo lo que hizo, que aunque el tiempo pase, él siga presente en nuestra historia; yo en honor a eso, sigo y seguiré recordándolo siempre, así, de esta manera, que es con la música”.

Durante el concierto musical, el pianista Jorge Luis Godíndez y el violinista, Jesús Maximino Álvarez, interpretaron composiciones del oriundo de la Ciudad del Prodigio, con piezas románticas como el Vals Josefina y de música moderna, como Ocotlán Taznahui.

Jorge Luis Godínez Castellanos dijo que el acervo del maestro Wilfrido Íñiguez está creciendo, y que se han asegurado algunas de estas partituras digitalizándolas, ya que solo se tenían las versiones hechas por el compositor; también dijo que los artistas ocotlenses se han encargado de compartir estas obras musicales con músicos de otros países, con la finalidad de que más personas conozcan la genialidad del maestro.

Por su parte el sacerdote Benjamín López, compartió un recuerdo del maestro Willy, a quien siempre lo recuerda así, tocando el acordeón mientras moría el sol y viajaban en una canoa, en el lago de Chapala:

“Caminamos, luego subimos a una canoa, y al ritmo de los remos, el señor Wilfrido Íñiguez iba tocando melodías inolvidables cuando estaba a punto de meterse el sol. Esa fue nuestra despedida, muy hermosa”.

Además del concierto, organizado por el Santuario del Señor de la Misericordia,en los últimos días las autoridades municipales, también llevaron a cabo una homenaje cívico, y conciertos por parte del Núcleo ECOS y del Grupo Tierra Mestiza.