Messi desata una revolución futbolística en EEUU
Causando un movimiento sísmico en el mundo del fútbol, Lionel Messi eligió en 2023 al Inter Miami para continuar su legendaria carrera y liderar el esperado despegue del fútbol dentro del mayor mercado deportivo del mundo. Foto: FRANCK FIFE / AFP




Miami, Estados Unidos.

El astro argentino desembarcó en julio en la liga norteamericana (MLS) cumplidos los 36 años pero con toda su influencia intacta, solo siete meses después de que se coronara con la selección albiceleste elevando su anhelada Copa del Mundo.

Con el triunfo en Catar-2022, Messi dio por terminada su etapa en el Paris Saint-Germain y, una vez confirmado que el FC Barcelona no podía recontratarlo, decidió mudarse a una liga menos competitiva.

La liga saudita lo intentó atraer con una oferta económica inalcanzable pero finalmente pesó más la decisión familiar de establecerse en Miami.

David Beckham y los otros dueños del Inter llevaban años trabajando discretamente en seducir al crack de Rosario, que se decantó por el estilo de vida de una de las ciudades más latinas de Estados Unidos y por un proyecto sobre el que construir su futuro cuando se retire del césped.

Al argentino, que no siente por ahora la atracción por los banquillos de otros gigantes como Cruyff o Zidane, el Inter le garantiza una futura participación en la propiedad de la franquicia.

Apple TV, dueña de los derechos de retransmisión de la MLS, se involucró también en el contrato de Messi, en una muestra de las expectativas que ha generado en distintos sectores la llegada del nuevo rey del 'soccer'.

"Único e irrepetible" 

La conquista de América de Messi tuvo un inicio 'hollywoodiense' en la Leagues Cup, un nuevo torneo que reúne durante un mes a los 47 equipos de la MLS y la liga mexicana.

En su debut ante Cruz Azul, el argentino ingresó como suplente y, cuando el reloj señalaba el minuto 90+4, acomodó la pelota en el césped y marcó un espectacular gol de tiro libre que daba el triunfo 2-1 a los locales.

Íconos del deporte estadounidense, como LeBron James y Serena Williams, vivieron el momento desde la grada del estadio DRV PNK, por donde a partir de entonces desfilan celebridades de todo tipo cada vez que Messi se enfunda su nuevo uniforme rosa.

  • Sin necesidad de pretemporada ni ningún tipo de adaptación, el atacante hizo campeón por primera vez al entonces peor equipo de la MLS, viendo puerta en los siete partidos de la Leagues Cup hasta sumar 10 goles y 4 asistencias.

"La llegada de Messi es un evento único y creo que irrepetible, sobre todo por cómo se dio", dijo a la AFP su compatriota Diego Valeri, ex futbolista y ahora comentarista de Apple TV.

"Todo lo que él esperaba de su elección se manifestó en un periodo de tiempo muy corto. Desde aquel primer momento en que entra a la cancha como si fuera un chico y anota el tiro libre de la victoria hasta que levanta el trofeo en Nashville", describió Valeri, ganador del premio MVP de la MLS en 2017.

"Messi dijo: 'Vengo a disfrutar', y me parece que no hubo cosa mejor. Lo disfrutó él, lo disfrutó el espectador, se le honró de todas las maneras posibles y él mostró un nivel de compromiso como si no fuese ya el mejor jugador de la historia", señaló.

El momento decisivo 

Tras aquel asombroso éxito, Messi y sus recobrados socios Sergio Busquets y Jordi Alba sufrieron problemas físicos por el calendario excesivo y no lograron el segundo milagro de impulsar al Inter hasta los playoffs.

Aun con esta decepción, Messi cerró 2023 siendo coronado en París con su octavo Balón de Oro.

El Inter, una franquicia con mediocres resultados desde su ingreso en la MLS en 2020, es ahora reclamado para jugar amistosos desde distintos lugares de América hasta Japón pasando por Arabia Saudita, donde Messi y Cristiano Ronaldo se reencontrarán sobre el césped el 1 de febrero.

"A los 36 años, tras dos décadas de una carrera sin paralelo, Messi proporcionó un estímulo singular al fútbol en Estados Unidos. La asistencia, el precio de las entradas, la venta de artículos y la audiencia se dispararon. Sus partidos adquirieron el cariz de un renacimiento religioso", describió la revista Time, que este mes lo nombró Deportista del Año.

El capitán albiceleste ha aterrizado además en el periodo decisivo para el fútbol en Estados Unidos, que recibirá la Copa América en 2024, el Mundial de Clubes en 2025 y la Copa del Mundo en 2026, coorganizada junto a México y Canadá.

"Me parece que es incalculable el impacto de su llegada", resume Valeri.

"Si bien el fútbol ya estaba siendo cada vez más seguido por los jóvenes en este país, amplificó la cantidad de gente que mira la liga tanto aquí como en el mundo", señaló. "Y todos esos chicos que lo adoran, que quieren tener su camiseta, son los que mañana van a fijar el rumbo del fútbol norteamericano".