Merkel reitera su compromiso de ayudar a Italia en crisis migratoria




Berlín, Alemania.

La canciller alemana, Angela Merkel, reiteró su compromiso de ayudar a Italia a enfrentar el masivo flujo de migrantes que llega en botes desde el norte de África, confirmó hoy la viceportavoz del Gobierno germano, Ulrike Demmer, en una comparencia rutinaria ante la prensa celebrada en Berlín.

Según explicó la vocera, en el transcurso de una llamada telefónica mantenida este miércoles, la mandataria le confirmó de nuevo al primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, el apoyo de Alemania para encarar la continua llegada de peticionarios de asilo al país mediterráneo.

Entre las medidas propuestas por Berlín y formuladas a lo largo de la conversación por Merkel se encontrarían el fortalecimiento de los ayuntamientos de Libia -país del que parten la mayor parte de barcos con migrantes hacia las costas europeas- que serviría para acabar con el negocio de los traficantes de personas en el norte de África.

Merkel y Gentiloni también saludaron el acuerdo en el que medió el presidente francés, Emmanuel Macron, que logró que los líderes rivales de Libia se comprometieran a un cese del fuego y a la celebración de las elecciones en el país lo antes posible, un paso que servirá para dotar de estabilidad a la región.

La interlocución entre los dos líderes se produjo tan solo un día antes de que el rival de Merkel de cara a las elecciones generales del 24 de septiembre, el líder socialdemócrata y ex presidente del Parlamento Europeo Martin Schulz, viaje a Italia para abordar, entre otros asuntos, la crisis migratoria europea.

Entre los puntos de su agenda figuran un encuentro con el propio Gentiloni, así como la visita a un centro de refugiados en Sicilia. Schulz, que presidió la Cámara europea entre 2012 y 2017 y ahora aspira a sacar del poder a Merkel, ha propuesto que los miembros de la Unión Europea (UE) reciban apoyo financiero de Bruselas si ayudan a Italia a aligerar su carga migratoria.

Asimismo, recientemente ha alertado del peligro de que se vuelva a repetir una crisis de refugiados como la del 2015, año en el que llegaron a Alemania cerca de un millón de solicitantes de asilo.