Luego de 70 años del bombardeo de Plaza de Mayo, el peronismo vuelve a la encrucijada
EFE/ Julieta Barrera




Buenos Aires.

Cuando se cumplen este lunes 70 años del bombardeo sobre la Plaza de Mayo de Buenos Aires, que buscó derrocar al entonces presidente de Argentina, Juan Domingo Perón, y terminó en una masacre de civiles, el movimiento peronista vuelve a una encrucijada por la condena a Cristina Fernández, quien está previsto que esta semana comience a cumplir condena. 

"Existe una continuidad entre 1955 y el presente", afirma en una entrevista el periodista y escritor Christian Vitale, autor del libro 'Junios', donde da cuenta de hechos que cambiaron la historia de Argentina para siempre, desde aquel bombardeo hasta los fusilamientos, justo un año más tarde, de los peronistas que evitaron aquella intentona golpista. 

Entre junio de 1955 y junio de 1956, Perón fue finalmente derrocado, marchó al exilio y el peronismo fue proscrito durante 18 años.

La condena de Cristina Fernández a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, por considerar probadas irregularidades en concesiones de obras viales cuando su marido, Néstor Kirchner, y ella fueron presidentes (2003-2015), busca el "amedrentamiento" de la sociedad, al igual que ocurrió con los bombardeos, detalla Vitale.

  • El 16 de junio de 1955, la Plaza de Mayo fue escenario de un ataque aéreo sin precedentes en la historia argentina, la Armada bombardeó a civiles frente a la Casa Rosada, sede del Gobierno, y llevó a cabo ataques en otras partes de la ciudad, como en los alrededores de la residencia del entonces presidente Perón.

Aquellos hechos marcaron un punto de inflexión en la historia política de Argentina, que, según Vitale, también profesor de Historia en la enseñanza media y superior, guardan una continuidad con la situación actual del peronismo.

"Lo que sucede hoy con Cristina forma parte de una historia en la cual toda aquella persona, o líder, que intenta disputar el poder real, sufre", asevera Vitale, al añadir que "la perspectiva histórica del campo nacional está sometida en esta circularidad de la historia".

Para el escritor y profesor, la condena a Cristina Fernández (conocida popularmente como CFK), al igual que el bombardeo, evidencia la profunda división entre el movimiento nacional popular y los sectores conservadores, por eso intentan "amedrentar" a la sociedad.

En su libro 'Junios. Peronismo y antiperonismo en la encrucijada', Vitale llega a la conclusión de que el bombardeo de 1955 es "un verdadero parteaguas en la historia política argentina".

"No hubo otro suceso en la historia mundial en el que la fuerza aeronaval de un país se revela, no solamente contra el presidente constituido, sino también contra el pueblo que lo apoya de manera masiva", explica a EFE.

Según el autor, aquel ataque solo es comparable con el bombardeo de Guernica, ocurrido en esa localidad vasca durante la Guerra Civil española, aunque en Argentina los responsables fueron conciudadanos de las víctimas:

"Los bombardeos sobre Guernica los provocan los alemanes y los italianos y no los propios españoles", recuerda Vitale.

¿El caso CFK puede ser catalizador del peronismo? 

El escritor considera que la detención de Fernández será "un mojón en la historia del peronismo y el país" y que lejos de debilitar al peronismo, podría ser el catalizador de una nueva respuesta popular.

 “El peronismo, que parecía estar en una etapa de debilitamiento, está comenzando a reorganizarse. Es capaz de reaccionar de formas imprevisibles”, anticipa Vitale.

Al mencionar la que se espera será una gran movilización de acompañamiento a la expresidenta el miércoles, 18 de junio, cuando se entregue a la justicia para dar inicio al cumplimiento de la condena.

"Cada vez que el liberalismo (conservadores, derecha y extrema derecha) intenta eliminar al sector nacional y popular se enfrenta a una reacción de ribetes impensados.

El peronismo tiene un componente pasional muy fuerte, enraizado en los sentimientos populares, en el hecho colectivo de pertenecer a un techo común, en la identidad, en ciertas tradiciones", asegura el autor.

  • A pesar de la magnitud del bombardeo de 1955, que causó 308 muertos y cientos de heridos, Vitale sostuvo que el hecho fue minimizado y distorsionado por la historia oficial.

 "La historia la escriben en general los que ganan, y no solamente los que ganan, sino los que la escriben", afirmó, al añadir que entonces "había muchas más plumas antiperonistas, lo que permitió que se instalara en el imaginario colectivo la versión de los opositores. La historia fue contada por la elite intelectual".

Después de los bombardeos del 16 de junio de 1955 sobre Buenos Aires reaccionaron algunos sectores del peronismo con la quema de iglesias, a raíz del poder que tenía la iglesia católica.

"Todos los portavoces de la oposición hicieron hincapié en esos hechos y borraron a los bombardeos del relato histórico", explica Vitale.

A pesar del triunfo de las fuerzas constitucionales (leales a Perón), se logró instalar confusión, terror e inseguridad en el pueblo argentino. 

"Perón instó a que el pueblo no reaccionara, a que se mantuviera en calma. Esa estrategia fue vista como una señal de debilidad por la oposición y contribuyó al golpe de Estado meses más tarde", reflexiona sobre las consecuencias.

Ahora, "la condena a Cristina Fernández parece ser un elemento fortalecedor, tonificador del peronismo; y está en manos de los dirigentes estar a la altura de entender este fenómeno", concluye Christian Vitale.

Laura Guarinoni