Guadalajara, Jalisco.
Las artes son un vehículo para que niños del Hogar Cabañas, que viven sin sus familias, algunos de ellos que han sufrido abusos de todo tipo, se expresen y se conviertan en mejores personas.
Circee Rangel, actriz y maestra de teatro, relató que junto con otros docentes y artistas de música, canto y danza, acuden al Hogar Cabañas, donde realizan talleres y al final de cada año realizan una presentación al público. Las instalaciones se abren una vez al año. La función de teatro, danza, del coro musical y de la orquesta infantil Ecos, se presentó el viernes 30 de noviembre.
Circee Rangel dijo que ella ha trabajado durante siete años en albergues y desde hace dos años participa con los pequeños del Hogar Cabañas.
“Es un trabajo muy entrañable, porque junto con otros maestros de arte, les damos coro musical, el programa Ecos y yo, que doy teatro. Estamos llenando de arte y de cultura, a esos niños y niñas que tenemos una gran deuda con ellos. Son pequeños que por distintas circunstancias se encuentran ahí, lejos de sus papás, creo que es lo peor que les puede suceder”, indicó.
Circee explicó que ella imparte un taller permanente de teatro, donde no se trata de formar actores o actrices, sino niños que jueguen a ser otros.
“Fíjate que yo tengo un taller permanente y en ese taller exploro herramientas varias que no tienen que ver con una presentación, sino que tienen que ver con que ellos exploren, a partir de roles, a partir del juego, porque el teatro es juego, y cada año, al final, tenemos una presentación, es muy importante porque es el único día que el Hogar Cabañas abre sus puertas a todo el público”, comentó.
Ahora, con el cambio en el Gobierno estatal, los programas de artes en el Hogar Cabañas no tienen certeza de seguir adelante, por lo que Circee Rangel cree que se le tiene que dar continuidad a estas actividades artísticas.
“Gracias por la pregunta, porque no sabemos. Es una buena oportunidad para decirle a las autoridades que estos programas son muy nobles. Yo apuesto por mi disciplina, que es el teatro, y por todas las artes. Nos hacen, si no ser el gran artista, sí mejores seres humanos”, finalizó.
En el Hogar Cabañas hay una población de alrededor de 500 pequeños, desde bebés hasta adolescentes y 80 de ellos participan en los talleres artísticos.