Zapopan, Jalisco.

Como “fallas graves”, calificó el alcalde de Zapopan, Pablo Lemus Navarro, el reemplazo de los neoprenos (amortiguadores entre las trabes y las columnas) que tendrán que hacerse en la Línea 3, lo que implicará un alto costo social y económico para comerciantes y vecinos que han sufrido afectaciones, durante los más de cuatro años de obras.

El error generará que los usuarios puedan utilizar el transporte masivo hasta diciembre de 2019, indicó Pablo Lemus.

“Esto podría tener una tardanza adicional en la construcción de un año. Es mucho tiempo, son muchas las molestias porque a vecinos de colonias como la Seattle, El Capullo, Tepeyac, Maestros y Villa Belenes, lo que nos urge es que el transporte público que ha sido desviado, salga de la zona, porque nos está destrozando todas sus calles, en su mayoría son calles que no están hechas para poder soportar la carga del transporte público y ahora resulta que nos quedará un año más de sufrimiento”, indicó.

Uno de los sectores más afectados es el de los comerciantes del Mercado del Mar y los negocios que están en el Centro de Zapopan, señaló Lemus Navarro.

“Hay implicaciones indirectas muchas, sobre todo para los comercios del centro histórico, en el Mercado del Mar y en todo el trayecto de la Línea 3. Escuché una entrevista en la que el delegado de la SCT (Salvador Fernández) dijo que todos los costos inherentes a la sustitución de estos ‘amortiguadores’ los hará directamente el proveedor sin costo al erario, por lo menos, eso es lo que dijo”, puntualizó.

Lemus se reunió el lunes con el gobernador electo, Enrique Alfaro, quien les comunicó las fallas detectadas en las obras de la Línea 3 del Tren Ligero.