Las decisiones en torno al uso del agua “tienen que ser más democráticas”, dijo Mariano Beret




Guadalajara, Jalisco.

Los ciudadanos tienen derecho a saber cuál es la calidad del agua que consumen a diario, ya sea en el Área Metropolitana de Guadalajara, como en el resto de municipios de Jalisco. Ese es uno de los temas que aborda el Consorcio de Investigación y Diálogo sobre Gobierno Loca, que organizó el curso Agua y Democracia: explorando iniciativas y experiencias en ciudades y municipios mexicanos”.

Mariano Beret Rodríguez, coordinador de Docencia del Consorcio de Investigación y Diálogo sobre Gobierno Local, quien es académico del Ciesas Occidente, dijo que tratan de incidir en proyectos para conocer mejor la calidad del agua.

“Queremos que se transparente la información sobre el agua, de la que hay y de la calidad de la que se sirve (a la población) y proveer elementos para poder planear a mediano y largo plazo de una manera oportuna y sobre todo democrática, en el sentido de que haya un manejo y una toma de decisiones mucho menos vertical, de abajo hacia arriba y que el ciudadano se involucre en los temas”, aseguró Mariano Beret.

Para el Consorcio, conformado por académicos del CIATEJ, el Colegio de Michoacán y el CIESAS Occidente, los casos más preocupantes son los de los pueblos de Poncitlán y El Salto y Juanacatlán, pero también son delicados los casos de San Juan de los Lagos y los pueblos de la barranca.

“Sí le puedo decir que son los dos casos más sonados (Poncitlán y El Salto), pero también están los pueblos de la barranca, derivado del relleno de Picachos y Poncitlán. Pero en San Juan de los Lagos identificamos problemas bastante severos”, explicó.

En el curso participaron como ponentes Gloria Tobón, quien es fundadora de la Asociación de Usuarios del Agua de Saltillo y David Barkin, economista de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), quien habló del caso de la gestión de agua en la Ciudad de México.


Ignacio Pérez Vega