Por Gabriela León
Enrique y Nalleli Miranda, padre e hija, ganaron este fin de semana en Guadalajara, el primer lugar en el campeonato estatal selectivo de la National Amateur Body Builders Association (NABBA), lo que les otorgó su pase al mundial de la misma cadena de fisicoconstructivismo de este año en Puerto Vallarta.
Nalleli tiene 26 años y ha hecho del entrenamiento y la sana alimentación su forma de vida para concursar en la categoría Diva Fitness Bikini y Sport Model. Su padre inició un poco más temprano: desde los 19 años decidió cambiar sus hábitos y desarrollarse como fisicoconstructivista, hoy participa como máster de 40 a 49 años y clasificados en clase alta.
A pesar de lo que pueda parecer, Enrique Miranda fue muy “pequeño” en su juventud, motivo por lo cual optó dedicarse al deporte:
“Para empezar yo estaba muy delgado y como que siempre te ven como algo insignificante, quieren abusar de ti, te ven como de que “no, éste no va a decir nada” y empieza la carrilla, lo que ahora le dicen el bullying”.
Por su parte, Nalleli externa que luego del primer concurso, decidió meterse de lleno.
“Realmente a mí no me gustaba para nada el gimnasio, nunca se me dio ningún deporte. Y los motivos fueron básicamente los mismos: yo estaba muy delgada, hasta en mi juventud. Mi objetivo principal fue subir de peso, ya después que empecé en lo del gimnasio, competi una vez y me gustó… desde entonces no he dejado, yo empecé a los 21 años”.
En total, el fin de semana pasado Lagos de Moreno ganó cinco primeros lugares, dos segundos y un tercero para representar a México en el mundial anual.
El mejor conocido como fisicoculturismo, es el deporte que se adopta como una forma de vida y se refiere a la construcción y cuidado del físico al buscar el desarrollo de los grupos musculares del cuerpo manteniendo siempre un balance en el desarrollo o la simetría, a través del levantamiento de peso y la alimentación.
Trofeos de Enrique Miranda
Para los Miranda, a pesar de capacitarse y actualizarse constantemente para ofrecer sus asesorías y entrenamientos personalizados a quienes lo solicitan, dicen que ellos no se mantienen a dieta. Sus logros se cumplen al llevar una alimentación balanceada:
“Es una forma de vida, de hecho. Nosotros así lo vemos ya. Y no tiene nada en especial, la verdad. El problema está en como nos educan cuando vamos creciendo. Los malos hábitos. La forma de alimentarnos de nuestros padres es totalmente diferente a lo que nosotros hacemos”.
“Todos crecemos con otras costumbres, los mexicanos tenemos costumbres de comidas con muchos carbohidratos sobre todo, entonces la gente se queda con la idea de que esa es la buena comida y la de nosotros es un sacrificio y no, realmente es lo que nos nutre y nos mantiene saludables”.
Entre trofeos, reconocimientos y medallas, Enrique afirma tener 400 y haber participado en una competencia internacional en Inglaterra. Nalleli, como se mencionó, ya ganó su primer pase al mundial.
Los Miranda viven del gimnasio y las asesorías, además de vender suplementos para deportistas, y afirman: estos recintos son su primer casa. Aunque sus competiciones sean rutinarias, el proceso de entrenamiento antes de cada concurso sí es especial, pues se reajustan los requisitos de peso, estatura y los parámetros de estilismo físico según las categorías.