En más de la mitad de escuelas primarias siguen a la venta alimentos chatarra y bebidas azucaradas




Guadalajara, Jalisco.

El programa Escuelas Saludables que desde 2014 prohíbe la venta de alimentos ultraprocesados –conocidos como comida chatarra- prácticamente fracasó en el país.

En la mitad de escuelas primarias supervisadas por la organización civil El Poder del Consumidor, siguen a la venta frituras, salchichas, dulces y postres. Además, 63% de los planteles venden jugos y aguas frescas, e incluso hay casos de venta de refrescos en forma clandestina, informó Liliana Bahena, coordinadora del proyecto Escuelas Saludables de la agrupación.

De esta forma, así no se pueden reducir los niveles de obesidad y sobrepeso entre los niños.

“Lo que encontramos es que actualmente existen ambientes escolares obesogénicos. Los principales factores para describir estos ambientes es que existen todavía 51% de la venta es de alimentos ultraprocesados y 63% de las bebidas ofertadas, son bebidas de azucaradas. Según la regulación, no puede existir ningún día venta de bebidas azucaradas, solo los días viernes pueden venderse alimentos ultraprocesados, que cumplen con algunos criterios nutrimentales”, lamentó.

Otro problema que encontró la organización es que apenas 1 de cada 9 escuelas tiene disponibilidad de agua natural potable y hay una baja disponibilidad de frutas y verduras, con apenas 4.3% en las tienditas escolares.

Según el estudio de El Poder del Consumidor, aplicado en primarias de la ciudad de México, Morelos y San Luis Potosí, la realidad es que los lineamientos del programa Escuelas Saludables, prácticamente nunca se aplicaron.

“Hay estudios que ponen en evidencia que realmente la implantación de la regulación nunca se realizó. Se actualizó pero realmente nunca se realizó. No hay conocimiento dentro de la comunidad escolar de que existe una regulación obligatoria y sancionable, no conocen contenidos, roles y responsabilidades tanto de autoridades educativas, como de autoridades de salud y comunidades escolares”, expresó.

Ahora, lo que queda es que el gobierno federal entrante y los gobiernos estatales se pongan las pilas y tomen en serio la promoción de entornos saludables en las escuelas, dijo Liliana Bahena.

“También estamos haciendo contacto con autoridades educativas y de salud para posicionar el tema en esta nueva agenda de salud, con tal de prevenir el sobrepeso y obesidad, pero también basado en el derecho de los niños a una salud y alimentación saludable”, advirtió.

El colmo es que los padres y madres de familia, revelaron en grupos focales, que ellos también envían alimentos ultraprocesados a sus hijos dentro de la lonchera escolar.


Ignacio Pérez Vega