Ecuador indaga presunto feminicidio de una militar dentro de un cuartel
Fotografía: AFP




Quito, Ecuador.

Ecuador investiga la violación y asesinato de una militar dentro de un recinto del Ejército, según autoridades y la defensa de la víctima que este jueves denunció omisiones oficiales en un presunto nuevo caso de feminicidio en instituciones de seguridad.

"En la autopsia se determina que (la subteniente Aidita Ati) fue golpeada, maltratada e inclusive violada", señaló la abogada Paola Montoya al canal Teleamazonas.

Ati fue hallada muerta el sábado en su habitación en el denominado Fuerte Militar Napo, una base en la Amazonía ecuatoriana. El ministerio de Defensa indicó en un comunicado que colabora en la investigación para que la Fiscalía "esclarezca este suceso en el menor tiempo posible".

Según la abogada las fuerzas militares "omiten" información sobre el caso pues tardaron en notificar a la familia de la muerte y en principio aseguraron que la subteniente había fallecido por asfixia mientras dormía.

"Queremos averiguar por qué le informan (tarde) al padre, por qué sacaron un comunicado diciendo que supuestamente ella se había ahogado con su propio vómito", apuntó Montoya. Más temprano la mujer había asistido a una celebración dentro del cuartel.

Ati murió por estrangulamiento y su cuerpo presentaba golpes en varias partes y huellas de violación, de acuerdo con la autopsia divulgada por medios locales.

Cuatro oficiales son investigados en libertad, mientras la familia pide que la justicia ordinaria a cargo del caso dicte prisión preventiva para evitar una fuga.

  • En septiembre de 2022, la abogada María Belén Bernal fue asesinada por su esposo, el teniente Germán Cáceres, cuando le visitó en una academia policial en las afueras de Quito, en un hecho que conmocionó al país. Su cuerpo estuvo desaparecido diez días y fue hallado en un cerro a pocos kilómetros de la Escuela Superior de Policía.

Tras el crimen, Cáceres se fugó a Colombia, donde fue capturado en diciembre de ese año.

Fue condenado a 35 años de cárcel.

En 2023, dos mujeres cadetes del Ejército denunciaron abusos sexuales por parte de cuatro alumnos fuera de una instalación militar. La Fiscalía abrió una indagación.