La calidad del agua del Sena mejora de cara a JJOO, según últimos análisis
Fotografía: JULIEN DE ROSA / AFP




París, Francia.

El Sena tuvo sus indicadores aptos para el baño varios días seguidos a finales de junio, por primera vez desde la publicación semanal de resultados, según los análisis bacteriológicos publicados el jueves, a cuatro semanas de que el río deba acoger pruebas de los Juegos Olímpicos.

Estos primeros buenos resultados, motivados sobre todo por un tiempo soleado en los primeros días del verano francés, fueron conseguidos a pesar de un caudal "de cuatro a seis veces" superior al "caudal habitual del verano", subrayaron la alcaldía de París y la prefectura de la región en su boletín semanal.

A pesar de ello, "la calidad del agua del Sena ha mejorado" para ser "conforme a los umbrales definidos por la directiva europea durante seis días" en "casi todos los cuatro puntos" de toma de muestras, celebraron.

Para ambas entidades, la mejora "es consecuencia del regreso del tiempo soleado y del calor", pero también "de las obras realizadas en el marco del Plan de Mejora de la Calidad de Agua del Sena", que copilotan desde 2016.

Las muestras de la semana 24 junio-2 julio muestran concentraciones de bacteria fecal Escherichia coli por debajo de los umbrales reglamentarios los días 26, 28 y 29 de junio y el 2 de julio en los cuatro puntos de control.

El 27 de junio y el 1 de julio, solamente un punto de control mostraba una concentración superior al umbral de las 1.000 unidades que forman colonia por cada 100 ml, el límite fijado por las federaciones deportivas internacionales para dar luz verde a las pruebas.

La concentración de enterococos, la otra bacteria fecal que se mide para autorizar o no las pruebas deportivas y el baño, estaba por debajo de los umbrales reglamentarios en los seis mismos días.

  • La fecha decisiva se aproxima para los organizadores olímpicos: después de la ceremonia de inauguración del 26 de julio en el río, el Sena debe acoger las pruebas de triatlón (30 y 31 de julio, 5 de agosto), la natación en aguas abiertas (8 y 9 de agosto) y el paratriatlón (1 y 2 de septiembre).

En caso de fuertes lluvias antes de la competición, que hagan elevarse los indicadores, el 'plan B' de los organizadores es aplazar unos días las pruebas afectadas pero un cambio de lugar.