Deserción y ausentismo, consecuencias de no regularizar clases presenciales, advierten padres
Fotografía: EFE/ Sáshenka Gutiérrez/Referencial




Guadalajara, Jalisco.

Los efectos de la pandemia en los alumnos, desde preescolar hasta licenciatura, han generado deserción o ausentismo frecuente a clases virtuales o presenciales. Algunos padres de familia explicaron que han tenido que recurrir a pagar clases extra para “nivelar” académicamente a sus hijos.

En un sondeo realizado en el Centro de la ciudad, se observó a diversos niños que acompañaban a sus papás y mamás, por lo que no acudieron a la escuela ni tomaron clases virtuales.

Juan Francisco Hernández Bañuelos es alumno de sexto de primaria en la escuela “Rafael Ramírez”, vive en Jauja, en Tonalá y estaba junto a su abuelito, quien explicó que el pequeño toma clases virtuales y no va al plantel. Sin embargo, los lunes no puede conectarse porque acompaña a su papá a trabajar como cerrajero.

“No fui, porque como mi papá está trabajando y mi hermano ya no va a la cerrajería, por eso. Ya me dejaron en línea y ya, eso es lo que pasó. No voy a ir. Puro en línea, porque mi papá trabaja y me metieron al negocio, se hacer llaves y toda la cosa”, refirió Juan Francisco.

Por su parte, Jesús Arriaga, quien vive en la Colonia Rancho Nuevo y tiene un hijo en segundo de primaria, explicó que le contrató a su pequeño una maestra que le da clases adicionales, ya que bajó mucho su rendimiento escolar.

Cada semana paga 120 pesos a la profesora, quien le da clases dos veces por semana.

“No, pues mal. Lo tuve que meter con otra maestra para que le diera clase presencial, porque nomás en la otra no. Sí tuve que pagar. 20 pesos la hora cobra. Dos veces por semana tres horas (120 pesos a la semana)”, indicó.

Otro caso lo expone Sonia Cobián, quien vive en Unión de Tula y tiene cuatro hijos en edad escolar. Una de sus hijas estudia la preparatoria y de plano dejó la escuela debido a que cayó en sus calificaciones y prefirió repetir todo el año, ya que con un bajo promedio no tendrá las mismas oportunidades para ingresar a una carrera en la Universidad de Guadalajara (UdeG).

“Muchísimo (les afectó la pandemia). A todos, porque tengo cuatro hijos. A los cuatro les afectó mucho. Tengo en prepa, en secundaria y todos bien afectados. Le afectó más a mi hija que va en la prepa, ella ya no quiso ir, porque les dan bajas calificaciones. La pasan, pero con muy bajas calificaciones, para seguir sus estudios así no le ayuda porque le dieron muy bajas calificaciones y perdió todo el año, prefirió repetirlo”, comentó.

La mayoría de los padres de familia prefiere que sus hijos vayan a la escuela, porque si se quedan en casa no tienen forma de gestionar el “autoaprendizaje”, como sugiere la Secretaría de Educación, cuando los papás buscan proteger a sus hijos de contagio por COVID-19.


Ignacio Pérez Vega