Denuncian hacinamiento extremo en cárceles de El Salvador




San Salvador, El Salvador.

Una organización no gubernamental denunció este miércoles el hacinamiento extremo en presidios y calabozos de la policía en el Salvador,  imposibilitando la readaptación de los internos en este país con altos índices de criminalidad.

"Lo que nos preocupa es la situación de las diferentes cárceles, incluyendo las bartolinas (calabozos) de la PNC (Policía Nacional Civil), en las que existe un hacinamiento extremo", declaró en rueda de prensa el coordinador de la La Comisión de Derechos Humanos de El Salvador (CDHES), Miguel Montenegro.

Hasta el 14 de agosto había 38.724 internos en las cárceles salvadoreñas, cuya capacidad es de 14 mil 300, según cifras de la Dirección de Centros Penales.

En los calabozos de la policía están recluidos otras 5.000 personas que esperan la depuración de sus procesos.

En los presidios, según Montenegro, la población reclusa carece de atención médica y como muestra de ello mencionó la muerte de varios reos a consecuencia de tuberculosis y otras enfermedades.

"El hacinamiento, la precariedad y las condiciones inhumanas en las bartolinas y los diferentes centros penitenciarios, no conllevan en lo absoluto a un proceso de readaptación, sino más pareciera que lo que se pretende es el exterminio" de los reos, indicó la comisión en un comunicado.

La Corte Suprema de Justicia emitió en mayo pasado una resolución llamando al Estado a enfrentar las "condiciones infrahumanas que viven los reos", recordó la comisión.

La CDHES también denunció los "abusos de autoridad" como "detenciones arbitrarias que van acompañadas de maltratos, golpizas, amenazas y hasta tortura por parte de algunos policías, militares y agentes del sistema penitenciario.

En algunas detenciones ocurre "la implantación de falsas evidencias, con la intención de detener a personas sospechosas por el simple hecho de ser jóvenes", advirtió la CDHES.

"Si el gobierno, quiere demostrar lo contrario de esta situación (de abusos), debe de ser más vigilante de las acciones de los miembros de la policía y de la fuerza armada, así como planificar y realizar una depuración de los malos elementos que más daño hacen a la PNC", precisó la comisión.