Con los satphones, empieza la carrera espacial en el mundo de los celulares
Un visitante utiliza un teléfono inteligente durante el Mobile World Congress (MWC), la mayor reunión anual de la industria de las telecomunicaciones, en Barcelona el 28 de febrero de 2024. (Foto de Josep LAGO/AFP)




Barcelona, España.

En un mercado del celular en busca de nuevas fronteras, los fabricantes se vuelven hacia el espacio con el desarrollo de la funcionalidad "satphone", gracias sobre todo al auge de la conectividad espacial, impulsada por actores como Starlink, propiedad del multimillonario estadounidense Elon Musk.

A la sombra de los gigantes del sector Samsung, Xiaomi y Honor, obsesionados con las perspectivas de la inteligencia artificial.

La empresa emiratí de telecomunicaciones por satélite Thuraya se introdujo en un nicho singular en el Salón Mundial del teléfono Móvil de Barcelona, presentando al público un "smartphone universal" que ofrece conectividad "celular y por satélite" por un precio "asequible" pero no revelado.

Bautizado Skyphone, este aparato, cuya salida se prevé en el "tercer trimestre" de 2024, ofrece la posibilidad de hacer llamadas y enviar mensajes vía satélite en más de 150 países gracias a acuerdos con más de 370 operadores, en comparación con unos teléfonos por satélite tradicionales que son muy caros y poco manejables.

"Los usuarios no quieren ir pasando del teléfono satelital al normal. Quieren usar su teléfono de cada día para acceder a las redes sociales, incluso cuando se van de aventura" a zonas no cubiertas por las redes móviles, explicó a AFP Sulaiman Al Ali, director general de Thuraya, que dispone de satélites que cubren Medio Oriente, África y Europa.

Sólo Huawei, con su Mate 60 Pro, disponible únicamente en el mercado chino, ofrece un servicio similar en el mercado de consumo.

Mientras que Apple ha sido pionera entre los grandes fabricantes en integrar la capacidad de enviar SOS vía satélite desde su iPhone 14, los fabricantes de teléfonos inteligentes con el sistema operativo Android de Google aún no han seguido su ejemplo.

  • Es probable que otras empresas sigan la tendencia de los celulares satelitales. Según Deloitte, en 2024 se venderán más de 200 millones de teléfonos inteligentes capaces de conectarse a servicios por satélite.

"Tener un smartphone que pueda enviar un texto preconfigurado de emergencia es útil.

Pero tener uno que admita mensajería en tiempo real y llamadas de voz sería aún más útil e impulsaría la adopción" por parte de los usuarios, explica a AFP Duncan Stewart, responsable de investigación sobre tecnología, medios de comunicación y telecomunicaciones de Deloitte.

"De momento, seguimos hablando de servicios premium para emergencias. A la larga, habrá tal proliferación de satélites en órbita terrestre baja que esto podría convertirse en una alternativa a la red tradicional de telecomunicaciones, sobre todo en determinadas zonas sin cobertura o en lugares donde, económicamente, es menos viable", añade Thomas Husson, analista de Forrester.

Boom del internet espacial 

El desarrollo creciente de los "satphones" se enmarca en un contexto donde el internet espacial se ve estimulado por el desarrollo de la conectividad de alta velocidad en órbita baja (OTB), destinada a servir a regiones aisladas y de difícil acceso sin pasar por infraestructuras terrestres (redes de cable, fibra óptica o antenas móviles).

  • En este mercado, cuyo valor se estima en 16.000 millones de dólares para 2030, varios gigantes ya han lanzado importantes maniobras.

Así, Starlink, más consolidado como uno de los principales proveedores de internet por satélite, con más de dos millones de clientes, alcanzó por ejemplo un acuerdo con el operador alemán T-Mobile para hacer pruebas de telefonía satelital en Estados Unidos.

"Entre el operador de satélites, el operador de telecomunicaciones y el fabricante, va a haber un juego de alianzas", predice Thomas Husson.

"Si los smartphones pueden conectarse a los satélites usando las normas, protocolos y tecnologías 5G ya existentes, se traducirá en un mayor uso", estima Duncan Stewart.