China negará la entrada a la mayoría de extranjeros, incluidos aquellos que ya tengan visado o permiso de residencia, para cortar cualquier rebrote del coronavirus, informó el ministerio de Relaciones Exteriores el jueves.
El gigante asiático, de donde surgió el COVID-19 en diciembre, reducirá igualmente de forma drástica la llegada de vuelos internacionales.
"La suspensión es una medida temporal que China se ve obligada a tomar ante la situación de rebrote" informó el ministerio en un comunicado, en el que detalló que la medida entrará en vigor la medianoche del sábado.
China no ha detectado nuevos casos de coronavirus por transmisión local, oficialmente, durante dos días. Pero los casos provenientes de gente que regresa del exterior han aumentado, hasta totalizar 500.