Guadalajara, Jalisco.

El problema que presentó un avión en su aterrizaje forzoso en Guadalajara perjudicó de rebote a los Charros de Jalisco, ya que la aeronave en que viajaban (vuelo 5645 de Volaris) fue desviada a León.

Un pasajero que acompañaba a la novena jalisciense relató que el avión volaba desde Culiacán con destino a Guadalajara, también con el equipo de los Charros. Este fue obligado a abortar el aterrizaje y tras media hora volando en círculos ordenaron, como quizá otras muchas aeronaves, volar a aeropuertos alternos, a este vuelo de Volaris lo enviaron a León.

Fuentes cercanas a la novena albiazul confirmaron que el equipo insistió para que les permitieran abandonar la aeronave para así poder viajar por tierra, ya que los jugadores deben entrenar y descansar para enfrentar mañana a los Tomateros de Culiacán. Después de una hora de diálogo, la organización jalisciense logró su cometido.

Según el comunicado oficial emitido por Aeroméxico, un Boeing 737-800 propiedad de la aerolínea presentó humo en el tren de aterrizaje. El problema fue controlado y "los 151 pasajeros a bordo y la tripulación han sido desembarcados y se encuentran bien".