El aspirante a una alcaldía en Zihuatanejo, en el sureño estado mexicano de Guerrero, fue asesinado a balazos la tarde del viernes, informaron autoridades locales este sábado.

Homero Bravo Espino, aspirante a la alcaldía por el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), fue atacado a tiros al interior de su vehículo en la localidad de San José Ixtapa, y más tarde falleció en un hospital.

"Por estos hechos, se integró una carpeta de investigación", informó en un comunicado Roberto Álvarez, vocero en materia de seguridad del Grupo de Coordinación Guerrero.

Bravo Espino, de 53 años de edad, se desempeñaba como director de Obras Públicas en la alcaldía de Zihuatanejo.

En un comunicado, el PRD condenó el "cobarde asesinato" del candidato.

El crimen sucede apenas dos días después de que Aarón Varela, otro aspirante a una alcaldía en el central estado de Puebla, fuera asesinado a tiros en una ola de violencia que ha golpeado a la política local en los últimos meses.

En enero, un aspirante a una candidatura municipal también en el estado de Guerrero fue asesinado a tiros.

En esas fechas, un diputado local, un alcalde y un regidor, todos militantes del izquierdista PRD fueron asesinados en distintos eventos en los estados de Jalisco (occidente), Guerrero y Tabasco (este).

Más de 100 alcaldes en funciones o electos, o ya fuera del cargo, han sido asesinados desde 2006, según datos de la Asociación Nacional de Alcaldes.

México registró un récord de asesinatos en 2017, con 25.339 homicidios, según cifras oficiales