Bruselas, Bélgica.
Veintitrés de los 28 países miembros de la Unión Europea (UE) acordaron hoy ampliar notablemente su cooperación militar para sentar las bases de una futura unión europea de defensa, un paso que fue calificado por jefes de la diplomacia en Bruselas como un "momento histórico" y un "hito" para el bloque comunitario.
La decisión de los ministros de Relaciones Exteriores y de Defensa de la UE de crear una unión europea de defensa tiene por objetivo hacer a la UE menos dependiente de Estados Unidos y estrechar la cooperación entre los socios europeos en proyectos militares.
La responsable de la Política Exterior Común de la UE, Federica Mogherini, dijo que se trata de un "momento histórico en la defensa europea". Este es "el comienzo de un trabajo conjunto" (...), algo grande", agregó la jefa de la diplomacia europea.
"Para nosotros era importante asumir una posición independiente, justamente después de la elección del presidente estadounidense", afirmó por su parte la ministra de Defensa de Alemania, Ursula van der Leyen. "Si hay una crisis en nuestra vecindad, debemos ser capaces de actuar", agregó.
Trump ha criticado a aliados de Estados Unidos en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) por no cumplir con el objetivo de la alianza de destinar a la defensa el dos por ciento de su producto interior bruto (PIB). Las críticas del presidente norteamericano han generado entre sus aliados europeos el temor de que Estados Unidos ya no se sienta comprometido con el pacto de defensa mutua de la OTAN.
El ministro alemán de Relaciones Exteriores, Sigmar Gabriel, calificó el acuerdo logrado hoy como un "hito en el desarrollo europeo". La proyectada cooperación es "un gran paso hacia la independencia y el fortalecimiento de la política de seguridad y de defensa de la UE", subrayó.
Con la firma del documento, los 23 países europeos también se comprometen a respetar 20 condiciones concretas para su participación en la futura unión de defensa, entre ellas un aumento periódico del gasto militar, la participación en proyectos militares conjuntos y la aportación de soldados para las fuerzas de reacción rápida de la UE.
Éstas últimas se crearon en 2007 con el nombre de Grupos de Combate (Battlegroups) pero hasta el momento nunca han entrado en acción.
Entre los países que no participarán en el nuevo proyecto de cooperación militar figuran Reino Unido y Dinamarca. Reino Unido pretende abandonar la UE en 2019 y Dinamarca tradicionalmente no participa en la política común europea en materia de seguridad y defensa. Los restantes tres socios de la UE -Irlanda, Malta y Portugal- aún no han decidido hoy si van a participar o no.
Oficialmente está previsto que el nuevo proyecto, llamado Cooperación Permanente Estructurada (Permanent Structured Cooperation, PESCO, en inglés), arranque en diciembre. Probablemente, los primeros proyectos concretos a ejecutarse se refieran a la creación de un comando sanitario europeo y de centros de conexión logística para el transporte de tropas y equipamiento.
La Unión Europea subrayó que el PESCO es un acuerdo complementario que no sustituye a la OTAN, a la que pertenecen 22 de los 28 miembros de la UE.