La Arquidiócesis de Guadalajara exige justicia por la ejecución del sacerdote Juan Miguel Contreras




Guadalajara, Jalisco.

La ejecución del sacerdote de 32 años de edad, Juan Miguel Contreras García, a quien asesinaron el viernes pasado antes de dar misa en la parroquia de Hacienda Santa Fe, en Tlajomulco, es una evidencia más de la “descomposición social” y la ola de inseguridad que vive nuestro país y el estado, advirtió el vocero de la Arquidiócesis de Guadalajara, Antonio Gutiérrez Montaño.

Entrevistado luego de la ordenación de tres obispos auxiliares en el Santuario de los Mártires, el portavoz de la Diócesis tapatía señaló que el cardenal Francisco Robles Ortega, dijo durante la celebración, que el plan de seguridad de las autoridades “es una estrategia fallida” y pidió que se haga justicia.

“Desgraciadamente es una expresión más de la desintegración social que vive el país y que ya abarca también a nuestro estado de Jalisco. No hay sector, no hay población que se vea exenta de ser víctima de una ejecución, como sucedió en este caso. No conocemos los motivos, se trataba de un sacerdote joven que aparentemente llevaba una vida ordinaria como sacerdote”, señaló el vocero de la Arquidiócesis de Guadalajara.

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), que preside Francisco Robles Ortega, censuró el asesinato del sacerdote y pidió que se aplique la justicia para que el caso no quede impune.

En lo que va del sexenio de Enrique Peña Nieto, han sido asesinados 23 sacerdotes y la mayoría de los casos están impunes.

El padre Antonio Gutiérrez desconoce si esta vez el homicidio de Juan Miguel Contreras será esclarecido por la Fiscalía General del Estado (FGE):

A la ordenación de los obispos auxiliares de Guadalajara, Héctor López Alvarado, Juan Manuel Muñoz Curiel y Engelberto Polino Sánchez, acudieron 10 mil personas, según Protección Civil de Tlaquepaque. Entre los asistentes estuvieron presentes el alcalde de Guadalajara, Enrique Ibarra Pedroza y el ex secretario de Gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez.

Desde hace 10 años, la Diócesis de Guadalajara –compuesta por más de 500 parroquias- no tenía una ordenación de un obispo auxiliar.


Ignacio Pérez Vega