Washington, Estados Unidos.
Donald Trump invitó este miércoles a la Casa Blanca a los líderes demócratas para terminar con el cierre parcial del gobierno en Estados Unidos, aunque advirtió que la parálisis presupuestaria podría durar "mucho tiempo", ya que no cederá en su demanda de un muro en la frontera.
En vísperas de la inauguración del nuevo Congreso que inicia sus sesiones el jueves y con una parálisis presupuestaria que se extiende desde el 22 de diciembre, las negociaciones sobre la ley de asignaciones están detenidas y ambos campos están enlazados en un debate estéril.
Trump insiste en que el presupuesto debe considerar una partida para construir un muro en la frontera con México para luchar contra la inmigración. Los demócratas, que a partir del jueves van a retomar el control de la Cámara de Representantes, consideran que este muro no es la respuesta más adaptada a un tema complejo como la inmigración.
"Podría durar mucho tiempo. Es un tema demasiado importante como para dejarlo pasar", afirmó el presidente estadounidense, que aseguró que la partida de 5 mil 600 millones de dólares que exige para el muro es "una cantidad pequeña tratándose de un tema de seguridad nacional".
Para intentar destrabar la situación, Nancy Pelosi, que el jueves asume como líder de la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes, y Chuck Schumer, jefe de la bancada minoritaria del Senado, asistirán a una reunión con sus homólogos republicanos en la Casa Blanca, que según la agenda del día está centrada en la "seguridad fronteriza".
La última reunión con los líderes demócratas el 11 de diciembre en el Despacho Oval se salió de los esquemas y delante de las cámaras Trump insistió en que el país "necesita" el muro, enumerando una serie de razones escritas en una tarjetas de apoyo que sus opositores denostaron como poco ciertas.
"Lo que el presidente está mostrando con sus tarjetas no son hechos", dijo entonces Pelosi, mientras que Schumer le recordó a Trump que sus declaraciones sobre el muro le habían valido varios "pinochos" de The Washington Post, una publicación que contrasta las afirmaciones del mandatario estadounidense.
Trump, que con el fracaso de las negociaciones justo antes de las vacaciones de final de año se quedó sin su escapada tradicional a Florida para jugar al golf en un clima templado, se dedicó durante las fiestas a insistir en la construcción del muro en su cuenta de Twitter.